En los años ochenta inició su propio laboratorio de nombre homónimo (Luis Milanés) de la mano de su familia. Compraron tecnología y pasaron de un esquema de solo importación de productos y materiales, a uno de producción local. En su más reciente avance, computarizaron toda el área de producción y hoy tienen robotizada buena parte de sus procesos. La implementación de tecnologías como la tomografía ha facilitado muchas tareas en este tipo de empresas, porque permiten acercamientos más exactos a la anatomía de los pacientes. Lea también: La pandemia aceleró la transformación digital en el sector de la salud Los clientes directos del laboratorio son los odontólogos, que les envían, a través de computación y sistemas remotos, la información diagnóstica, como imágenes. Eso permite que el diseño de las soluciones dentales sea personalizado y su producción, muy ágil. El proceso de automatización fue contratado con la firma Omnicon, especializada en aplicar tecnología a los procesos industriales. Actualmente, el Laboratorio saca cerca de 10.000 unidades mensuales, lo que significa que su producción se duplicó entre 2017 hasta la fecha, al igual que sus ingresos. Isabel Milanés, hija de Luis y quien trabaja en la compañía familiar, señala que la aplicación de tecnología y la automatización les han permitido crecer y hoy ya tienen 15 agencias en todo el país, así como están ampliando la planta para consolidar el proceso. No descartan que hacia 2022 busquen la posibilidad de internacionalizarse.