En lo corrido de este año, 140 se han ahogado en la misma costa donde murió Aylan, de los cuales 11 eran niños. En total, 418 personas han perecido desde enero en el Mediterráneo. Las cifras preocupan en tiempos en que las naciones europeas no logran ponerse de acuerdo sobre una política única para atender la ola migratoria.