A través de un comunicado, Angelino Garzón anunció que Tomás Concha, el funcionario acusado de presunto acoso sexual, no seguirá trabajando con la Agencia de Cooperación con Estados Unidos (USAID). El vicepresidente señaló que el contrato del funcionario finaliza el próximo 30 de noviembre y que no será renovado, por lo que cesarán todas sus actividades y compromisos con el Programa Presidencial de Derechos Humanos. Garzón reiteró que será la justicia la encargada de determinar si Concha es culpable o inocente, pero recalcó que rechaza cualquier tipo de “violencia, chantaje, abuso o discriminación contra las mujeres”. Tomás Concha está acusado de presunto abuso sexual por parte de Lina María Castro, una funcionaria adscrita a su dependencia en el programa presidencial para los derechos humanos. En la denuncia, la funcionaria asegura que desde diciembre de 2010 fue víctima de acoso y abuso sexual por parte de Concha. La Fiscalía abrió una investigación formal en su contra. Mediante un comunicado, Concha reconoció que tuvo una relación con Lina María Castro, pero aseguró que fue “consentida”. “Reconozco que tuve una relación consentida sin ninguna clase de amenaza, chantaje o violencia con Lina María Castro Torres. En consecuencia, tengo la plena certeza de no haber infringido en forma alguna la ley penal”, señaló el funcionario. Concha añadió que por ser un contratista, “no tengo capacidad para nombrar, vincular, ascender, premiar, castigar o despedir a ninguna persona que tenga cualquier tipo de relación laboral o contractual con el Departamento Administrativo de la Presidencia de la República o el Programa Presidencial de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario”.