Un informe presentado la semana pasada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) reveló un incremento alarmante en los casos de obesidad infantil en menores de 5 años. Según la investigación, hay cerca de 42 millones de casos, casi el doble que hace 25 años, y el 83 por ciento de ellos en países de ingresos medios y bajos. La OMS destaca entre las causas de esta problemática la mala alimentación, la poca actividad física en los colegios, la falta de regulación del mercado de alimentos que engordan y la herencia de las madres. Por eso, los expertos advirtieron que es indispensable dar una respuesta global y coordinada para combatir esta epidemia del siglo XXI.