Gabriel* nació en un pequeño pueblo antioqueño. Una de esas tantas poblaciones aisladas de los principales polos de desarrollo del país. Gracias a su talento, dedicación y ambición fue aceptado en la Universidad de los Andes (el primero en la historia de su pueblo) después de ganar una beca de Ser Pilo Paga. Una vez en Bogotá, el profesor de uno de sus cursos de matemáticas detectó que Gabriel era el alumno más aventajado. Un joven educado en una institución pública con todas las limitaciones imaginables, mostraba mejor desempeño que sus compañeros provenientes de los más reconocidos colegios del país.

Esto no pasó desapercibido. El profesor en mención le pidió a Gabriel quedarse a conversar con él al final de una sesión de clase. Tenía gran curiosidad de conocer a quien fuese su maestro en la escuela del pueblo. Seguro que de esa persona y su método pedagógico tendríamos mucho que aprender en Uniandes. La respuesta de Gabriel fue fantástica: “no, profe, en mi escuela no había docente de matemáticas”. ¿Cómo así? Preguntó estupefacto el experto con Ph.D. de la Universidad de California. ¿Y cómo desarrollaste semejante habilidad matemática? Pues me tocaba visitar el punto de internet gratuito del pueblo y así aprendí: solo y por internet.

La historia de Gabriel es la de nuestros becarios. De los jóvenes de escasos recursos y un talento sobresaliente que saben aprovechar las oportunidades que les llegan. En este caso, a través de una buena educación, lograrán romper la trampa de pobreza en la que sus familias han estado atrapadas por generaciones. Ninguna otra inversión o intervención genera movilidad social con tanta efectividad como el acceso a formación terciaria de calidad.

Es por eso que en Uniandes decimos que cada beca que otorgamos, es una vida que transformamos. Más de 1.000 personas se han graduado del actual programa de becas Quiero Estudiar. Una cifra similar cursa sus estudios en estos momentos. Para el primer semestre de 2020 daremos 135 nuevas becas, sumadas a la financiación del programa estatal Generación-E. En total, ingresarán más de 560 becarios de una población total de unos 1.800 primíparos.

Estos guarismos son positivos pero insuficientes. No es menos que una tragedia nacional cada vez que un joven talentoso como Gabriel no logra acceso a una educación de calidad y por ello se limita su verdadero potencial. Ya sea por insuficiencia de cupos en las buenas universidades públicas o por la barrera de costos en las buenas universidades privadas.

Por esta razón no podemos cesar en los esfuerzos para conseguir cada vez más recursos para financiar a aquellos con grandes condiciones intelectuales, pero sin capacidad de pago. En tal contexto, la emisora La W Radio en conjunto con la Universidad de los Andes, la Universidad del Norte, La Universidad Tecnológica de Bolívar y la Universidad Pontificia Bolivariana (sede Montería) idearon la iniciativa Pa’lante Caribe. Esto en asocio con Supertiendas Olímpica, Scotiabank Colpatria y el Banco Interamericano de Desarrollo, así como el centro comercial Unicentro y la asociación de egresados de Uniandes, entre otros.

A través de Pa’lante Caribe pretendemos becar a más de 100 jóvenes talentosos del caribe colombiano (provenientes de los estratos socioeconómicos 1, 2 y 3) para que hagan sus estudios de pregrado en alguna de las instituciones antes mencionadas; teniendo además la posibilidad de movilidad estudiantil, pasantías, transferencias y dobles titulaciones. Las metas de esta inédita iniciativa de captación y uso colectivo de recursos incluyen superar 6 mil millones de pesos de recaudo, por medio de más de un millón de donaciones. Hoy vamos bien, pero vamos por más.

Sea el objetivo de esta pieza hacer la siguiente invitación filantrópica a mis lectores: en esta navidad y en el contexto de las protestas sociales, regalemos educación. Sin importar el monto, regalemos oportunidades a lo mejor del talento colombiano. Ellos serán instrumento para que todos tengamos un futuro mejor.

Para hacer sus aportes visite: www.PalanteCaribe.com

*Nombre modificado para proteger la privacidad de nuestros becarios.