Las viviendas que está otorgando el Gobierno Nacional siguen presentando inconsistencias. En días pasados se abrió la discusión porque la asignación de las mismas, se estaba haciendo de manera irregular y con intereses particulares de por medio. Ahora, el Decreto 2391 de 2013 abriría nuevamente la polémica, debido a que a la reglamentación que se le hizo al Programa de Vivienda de Interés Prioritario para Ahorradores (dirigido a los hogares con ingresos familiares de hasta dos salarios mínimos), se le quitó la exigencia de que en la carta de pre-aprobación del crédito, el establecimiento certifique que el potencial deudor no ha sido beneficiario anteriormente. Ahora ¿quién corroborará esto?
Cancele en cualquier momento