La llamada de atención del Vicefiscal, de paso, reabrió entre los lingüistas la pregunta sobre su procedencia.  El Diccionario breve de colombianismos lo define como una “molestia” o “mortificación”. Y la única pista que tienen los expertos sobre su etimología se encuentra en un libro del lingüista Roberto Restrepo, donde lo relaciona con el término ‘peneque’, que en español significa ‘borracho’. Según él, la impertinencia personificada es el borracho y, así, “nuestro pereque” podría ser la “corrupción” del peneque.