Las fotos de la joven Pippa Middleton arreglando la cola del vestido de su hermana antes de entrar a la iglesia le dieron la vuelta al mundo, y generaron millones de comentarios en redes sociales, pues estuvo a punto de robarse el protagonismo de la novia. Días después del matrimonio, cientos de portales de internet les daban tips a las mujeres sobre cómo lograr el trasero tan perfecto de Pippa. La joven aprovechó al máximo sus 15 minutos de fama. Publicó un libro titulado Celebrate! y fue contratada como columnista en medios como Vanity Fair, Waitrose Kitchen y The Telegraph. Pero el idilio no duró mucho. Los ingleses la acusaron de utilizar su cercanía con la familia real para conseguir contratos, los lectores se quejaron enfáticamente de sus columnas y su libro fue uno de los menos vendidos en el Reino Unido. Además, la cadena de televisión norteamericana NBC –que el año pasado estuvo interesada en contratar a la joven Middleton– cambió de opinión. Parece que a Pippa se le está acabando su cuarto de hora.