A través de un anuncio conjunto, ocho senadores de distintas bancadas, especialmente de oposición, decidieron firmar de forma conjunta una ponencia negativa para archivar la polémica reforma a la salud del Gobierno Petro.
Se trata de Nadia Blel (Partido Conservador), Miguel Ángel Pinto (Partido Liberal), José Alfredo Marín (Partido Conservador), Alirio Barrera (Centro Democrático), Honorio Henríquez (Centro Democrático), Lorena Ríos (Colombia Justa Libres), Norma Hurtado (La U) Berenice Bedoya (ASI).
SEMANA habló con los senadores, quienes coincidieron en varios puntos y razones para tomar esta decisión, por ejemplo, que desde el Gobierno no se tuvieron en cuenta varias de sus recomendaciones y que el proyecto podría ser nocivo para el país y la salud de los colombianos.
“Es una posición personal. Hace más de un año le había pedido al partido no solamente no apoyar la reforma sino que fuéramos partido de oposición de Gobierno”, aseguró el senador Marín, del Partido Conservador.
Agregó que desde hace más de un año se había abierto el debate pero que la reforma siguió sin modificaciones, por lo que decidió respaldar esa ponencia de archivo. “Nosotros creemos que es mejor archivarla. Estoy de acuerdo en reformas, pero no como la está presentando el Gobierno”, afirmó Marín.
El senador del Partido Conservador considera que, con los ocho votos de la ponencia, la reforma está hundida, teniendo en cuenta que es la mayoría en la Comisión Séptima, conformada por 14 senadores.
Por su parte, la senadora Lorena Rios, vicepresidenta de la Comisión Séptima del Senado y quien fue una de las que lideró la ponencia negativa, aseguró que tomaron esta decisión luego de haber hecho siete mesas técnicas en las que se tuvieron en cuenta interpretaciones de distintos sectores.
“Las mesas técnicas las terminamos la semana pasada. Evidenciamos que definitivamente lo que necesita Colombia no está definido en el proyecto de reforma que tenia el Gobierno nacional”, aseguró.
La senadora del partido Colombia Justa Libres afirmó que su reto como vicepresidenta de esta comisión fue construir una ponencia para sustentar técnicamente por qué esa reforma es inconveniente. “Los pacientes fueron nuestro foco central”, dijo.
Ríos afirmó que una de las decisiones que la llevó a tomar esa decisión fueron los 10 millones de pacientes con enfermedades crónicas en el país que podrían quedar en riesgo con ese sistema que propone el Gobierno. Además de la falta de impacto fiscal que no había sido presentado por el Ministerio de Hacienda.
Otro de los que respaldó la ponencia negativa de la reforma a la salud fue el senador Honorio Henriquez, del Centro Democrático.
Una de las razones también fue la falta de información del Ministerio de Hacienda sobre el impacto fiscal del proyecto, como lo dijo la senadora Norma Hurtado, de La U, al defender su decisión. Henríquez también dijo que está en contra de los decretos que ha emitido el presidente que impactan al sector.
“Me dicen que hay nueve votos, con el de la senadora Ana Paola Agudelo, quiere decir que está hundida. Pero con los siete iniciales ya está hundida”, dijo el senador Henríquez.
El senador Alirio Barrera, otro de los ponentes, aseguró que siempre ha estado en contra de esa reforma a pesar de que reconoce que no todo lo que se propone es malo, sino que varias de esas propuestas se pueden implementar de otra manera sin necesidad de una reforma, como los Caps, la construcción de hospitales, el acceso de los colombianos a la salud, entre otros.
“Lo que nos preocupa son temas como las enfermedades de alto costo, la imposibilidad para que los colombianos puedan elegir su EPS, hoy lo pueden hacer. Esto no es en contra del Gobierno o del presidente”, aclaró el senador del uribismo.
La senadora Berenice Bedoya dijo que faltó mucho consenso entre el Gobierno y los distintos actores del sistema, entre ellos los pacientes. “De las audiencias no se sacaban conclusiones, no tiene aval fiscal, responsablemente y coherentemente no podíamos hacerle esto a los pacientes”, dijo la senadora.
Por su parte, Nadia Blel dijo que tomó la decisión luego del “escuchar el clamor de los colombianos” y distintos sectores entre ellos la academia que recomiendan que esta reforma no es conveniente para el país.
Finalmente, Miguel Ángel Pinto afirmó que tomaron la decisión después de un minucioso estudio solicitaron el archivo, entre otras, por vicio de forma, de fondo, y por “ser innecesaria” para el país.
En ese sentido, ahora se espera que en los próximos días sea citada la sesión de la Comisión Séptima del Senado y se vote oficialmente. Si se cumplen estas posiciones, la reforma se hundirá.