SEMANA conoció este 24 de abril, por fuentes oficiales de la Casa de Nariño, que ya está redactada la iniciativa de un nuevo borrador de reforma a la salud que contó con la participación de, al menos, cuatro Entidades Promotoras de Salud (EPS), entre ellas, la Nueva EPS.
Además, se conoció que estuvieron representantes de Acemi, Gestarsalud, Salud Total EPS, EPS Sura, Compensar EPS, Mutualser EPS y Coosalud EPS.
Tras ello, el exministro de Salud Alejandro Gaviria se refirió frente al tema y rechazó el hecho de que Gobierno y EPS se hayan reunido a puerta cerrada para discutir el tema.
“La reforma concertada entre el gobierno y las EPS a puerta cerrada no mejora la reforma negada por el Senado. Facilita, eso sí, que las EPS se transformen en gestoras (le da continuidad a un negocio)”, dijo Gaviria.
Del mismo modo, afirmó que tener un nuevo borrador no resuelve las grandes preocupaciones de la ciudadanía, como lo son la “sostenibilidad (genera más gasto sin fuentes claras de recursos), la ruta del paciente (que quedará a la deriva), la fragmentación entre la atención primaria y la de mayor complejidad y los incentivos para una adecuada gestión de los recursos. Sigue siendo una reforma confusa y perjudicial”.
De acuerdo con las fuentes de la Casa de Nariño, el plan lo puso en marcha el propio presidente Gustavo Petro días después de que la Comisión Séptima del Senado le archivara su controvertido proyecto. Él habla de sesiones permanentes e intensivas de trabajo de 100 horas.
A las reuniones convocadas por la Casa de Nariño han asistido los ministros de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, y el propio presidente. El ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, ha acompañado algunas de las jornadas.
De acuerdo con la fuente y con el documento conocido por SEMANA, ya están concertados entre el Gobierno y las EPS 50 artículos, entre ellos donde queda consignado cómo pasarían de ser empresas prestadoras de salud a gestoras de vida, como planteó la exministra de Salud Carolina Corcho.
Este borrador es diferente del texto inicial y la idea del presidente es que esté concertado con las empresas para que empiece a ser socializado lo más pronto posible.
Aunque algunos sectores políticos le han recomendado radicarlo antes del 20 de julio porque es una ley ordinaria, en la Casa de Nariño estiman que se haga en la segunda legislatura porque el Gobierno está concentrado en correr con la reforma pensional que amaga con hundirse si no está aprobada en la plenaria de la Cámara antes del 20 de junio.
En todo caso, la construcción del nuevo proyecto quiere hacerse de manera consensuada y el número de artículos se ampliaría sustancialmente y con base en el desarrollo de las conversaciones entre las partes.
Un punto clave es que el Gobierno Petro insiste en la creación del Consejo Nacional de Salud, una entidad que fue creada por la Ley 100 y que fue eliminada en 2007, para que asuma la dirección del sistema de salud bajo la vigilancia del Ministerio de ese sector.
Dicho consejo estaría compuesto por seis representantes del Ejecutivo y mantendría la esencia de lo que se planteó en la reforma que se hundió, donde decía que tendría “autonomía decisoria; tendrá a cargo la concertación de iniciativas en materia de política pública de salud, llevar iniciativas normativas, evaluar el funcionamiento del sistema de salud y generar informes periódicos sobre el desenvolvimiento del mismo”.