Los cuentos de hadas contemporáneos se caracterizan por tener de por medio un contrato prematrimonial. El protagonizado por John Kennedy y su esposa Carolyn Bassette no ha sido la excepción. Doce días antes del casamiento la pareja firmó un acuerdo que estipula la indemnización a la que tendrá derecho Carolyn en caso de divorcio, dependiendo de los años que dure el matrimonio. Si la separación ocurre antes de los tres años, ella tendrá derecho a un millón de dólares. Si sucede entre los tres y los 10 años recibirá dos millones, y si se produce después del décimo año el monto será elevado a tres millones. Una cifra nada despreciable para Carolyn pero que, en todo caso, no afecta en nada la fortuna de John Kennedy, la cual asciende a unos 50 millones de dólares.