Hubiese sido lo más lógico y democrático, puesto que con los hechos bochornosos sucedidos en los últimos días queda plenamente demostrado que los colombianos no los aceptan mientras no confiesen sus delitos y se sometan a las autoridades de la Jurisdicción Especial para la Paz, JEP. Para hacer proselitismo político se requiere estar en paz con Dios, con la sociedad y con nosotros mismos; tener cargos de conciencia en cualquier gesta democrática es la peor presentación.Es indudable que el vocablo perdón suena muy bonito; bien manejado y pronunciado desarma espíritus, pero, a la hora de la verdad, encontrarnos de frente con quienes fueron nuestros verdugos las cosas toman un tinte diferente; se enervan los espíritus reviviendo los momentos de horror y de terror que se vivieron a costa de sus acciones vandálicas, destructoras y criminales.No se puede hacer proselitismo político con pretensiones de poder, sobre las heridas y laceraciones del pueblo colombiano; primero hay que iniciar un proceso de trabajo social, con resarcimiento a las víctimas, caso contrario, la mayoría no cesará en sus saboteos y abucheos, hasta tanto no se les repare los daños y perjuicios causados, por una guerra que nunca fue de ellos.Lo anterior lo demuestran las rechiflas a las manifestaciones a donde han llegado, con el fin de exponer su proyecto político a la Presidencia de la República y al Congreso; muy seguramente que estos hechos seguirán sucediéndose, puesto que a todo lo largo y ancho del territorio nacional, el partido político de las Farc, tiene millones de damnificados; además de los asesinatos, las viudas y huérfanos, que no cesan en pedir se les indemnice y reconozcan sus derechos.El partido de la Farc, debe entender que si bien, se han silenciado los fusiles, gracias a la firma del acuerdo de paz, los millones de víctimas del conflicto armado por secuestros, extorsiones, violaciones, desplazamientos, asesinatos y en fin, toda una parafernalia de desastres, que se cometieron en los más de cincuenta años de violencia, esperan una respuesta positiva para rehacer sus vidas.Reflexionemos con criterio de lógica y de razón, si bien los caminos democráticos les han sido abiertos, no quiere decir que ignoren y violen los derechos de las víctimas.urielos@telmex.net.co