Así lo anunció el ministro de Trabajo y encargado de Salud, Juan Luis Londoño, quien agregó que encargará a la Superintendencia de Industria y Comercio de imponer drásticas sanciones a seis laboratorios que no aplicaron las medidas tarifarias.Quienes compren medicinas deberán asegurarse de que los precios vayan impresos en la caja, aseveró el ministro y sostuvo que si esto no se cumple el usuario debe denunciar el caso ante la Comisión Nacional de Medicamentos o ante el Invima.Londoño indicó que hará un seguimiento más estricto a los medicamentos contra el Sida, con los que se han venido cometiendo abusos. Además en las droguerías y centros clínicos habrá un catálogo que contienen la naturaleza y composición del producto, así como los precios autorizados para el público.