Siete personas heridas, entre ellas dos menores de edad, un policía y una mujer embarazada, dejaron este viernes ataques de la guerrilla de las FARC en dos pueblos del departamento del Cauca. Un primer caso se produjo en la población de Caldono, cuando en una calle vecina al cuartel de Policía estallaron varios artefactos en un vehículo estacionado, según fuentes oficiales y habitantes del lugar. Algunos cilindros de gas doméstico estallaron en el automóvil, que resultó destruido, y la onda explosiva causó destrozos importantes en fachadas, puertas y ventanas del cuartel, así como de un hospital cercano y de un colegio de monjas abandonado. Tras la explosión, los rebeldes de las FARC iniciaron el lanzamiento de granadas artesanales e hicieron disparos contra el mismo cuartel policial. "La gente tuvo que correr y esconderse en las casas", dijo Josefina Ramos, una de las vecinas del cuartel policial atacado. Ramos dijo que acababa de dejar a su hija mayor en un colegio cuando sintió el estallido de los artefactos en el vehículo que había sido estacionado en su calle unos minutos antes de las 07:30 de la mañana. "En la casa se habían quedado mi esposo y mi hija menor, pero no les pasó nada, afortunadamente, pero eso sí, la casa me le dañaron mucho", añadió. Aún queda al menos uno de los cilindros de gas sin estallar debajo del vehículo, relató Ramos desde esa localidad. Un avión y un helicóptero artillado de la Policía reforzaron las tareas de defensa y dispararon repetidamente y durante varias horas en los alrededores de Caldono, pequeña población en el departamento del Cauca, de unos 3.000 habitantes. Muchos de los habitantes empezaron a evacuar la población, mientras otros muchos se refugian temerosos en sus casas, reveló por su parte un fotógrafo en el mismo lugar. En el hospital local se reportó que una mujer embarazada y dos menores de edad recibieron algunas heridas por esquirlas de vidrios pero ninguna de gravedad. Algunas autoridades señalaron que los guerrilleros que atacaron al pueblo pertenecen a la "columna móvil 'Jacobo Arenas'" de las FARC, que actúa en una vasta región de ese departamento. También en el Cauca, la policía informó de un segundo ataque, en este caso contra un helicóptero de transporte de dinero para una sucursal del Banco Agrario en el municipio de Argelia. En el momento en que iba a aterrizar el aparato en un descampado, estalló un artefacto y los asaltantes, al parecer también guerrilleros de las FARC, empezaron a disparar desde la maleza. Tres civiles y un policía resultaron heridos, y según las autoridades, los presuntos rebeldes no pudieron robar el dinero por cuanto el helicóptero alzó de nuevo el vuelo.  EFE