Desde que Alvaro Uribe fue elegido, se asumió que la revocatoria del mandato de los congresistas no sería una de sus prioridades pues, al fin y al cabo, el nuevo Congreso tuvo una renovación cercana al 50 por ciento y es de mayoría uribista. Igualmente muchos pensaron que había desistido de su propuesta de un sistema unicameral y que se iba a limitar a reducir el número de congresistas. Pues resulta que los que han trabajado en forma cercana a él en estos días están sorprendidos: aunque Uribe es muy reservado y no muestra todas sus cartas, el mensaje que transmite es que ninguno de los temas de su campaña era simple retórica electoral y que por lo tanto, ni la revocatoria ni el sistema unicameral están descartados.