Es un estado mental y, a la vez, un tipo de música electrónica. Y para ver cómo ambos significados confluyen en la misma palabra, basta hacer clic en un video publicado en semana.com. La guerrillera holandesa Tanja Nijmeijer, hoy negociadora en La Habana, aparece allí bailando la música de su natal Europa en la selva colombiana. Tiene los ojos cerrados y las manos en alto y mueve su cuerpo como el de una serpiente, mientras otros la observan. En pocos segundos el trance se acaba, pero la guerra continúa.