En la mañana de este lunes, bajo un sol brillante y con la atmósfera despejada, los barranquilleros se mofaban de los presagios de lluvia anunciados en los pronósticos meteorológicos.Pero después del mediodía una oscura nube, que se movía desde el mar hacia el continente, y un viento frío sacudieron la ciudad durante dos horas con ráfagas de fuertes vientos e intensa lluvia.El balance del vendaval, según el Comité distrital de atención y prevención de riesgo, fue de 204 viviendas destechadas, 18 colegios afectados, 70 árboles caídos y 13 circuitos de energía fuera de servicio por la caída de postes y cables de energía.Lo que vivieron los habitantes de la capital atlanticense fue un vendaval con vientos encontrados de 60 y 70 kilómetros por hora, según dijo en su perfil de Twitter el director de pronósticos del Ideam, Christian Uscátegui.Los barrios más afectados fueron Nueva Colombia, Siete de Abril, Las Américas, El Pueblo, La Manga, Santuario y 7 de agosto. También hubo vientos fuertes en Soledad (donde queda el aeropuerto Ernesto Cortissoz) y Puerto Colombia.Según especialistas del Ideam, este fenómeno se le atribuye al paso de una onda tropical que incrementó los vientos y el oleaje en el mar Caribe."Si hubiera tenido más rotación en su parte inferior, hubiese sido un microtornado más destructivo", agregó Uscátegui.En mayo pasado, los siete departamentos del Caribe registraron las más altas temperaturas de 2016. En Barranquilla, de acuerdo con el Instituto, entre el 20 y el 23 de mayo –finalizando el fenómeno de El Niño- se registraron temperaturas de 37,5 grados Celsius a la sombra.Esto, a pesar de que en otros años, según el mismo Instituto, se registrara hasta 39 grados a la sombra, con sensación de 45 grados en la capital de Atlántico.