El cielo de Candelaria, Valle del Cauca, se está quedando sin aves. La semana pasada encontraron una fosa con restos de garzas, gallinazos, torcazas, garrapateros, chamones y canarios costeños. Eran 200 animales en total que, según algunos testigos, han sido envenenados de forma masiva con cebos para evitar la contaminación por los gérmenes que transmitirían a aves de corral. La Fiscalía de Candelaria adelanta una investigación para encontrar las empresas avícolas responsables de este atentado contra el ecosistema.