Las bolsas en los ojos son un problema en el párpado inferior, y de acuerdo con el Grupo Sanitas de España, puede tener múltiples causas como: retención de líquidos, mala alimentación y dormir mal o falta de descanso, además de una predisposición genética.

De todos modos, es importante resaltar que usualmente, las bolsas debajo de los ojos son una preocupación estética y, raramente, un signo de una afección grave.

Así las cosas, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, reveló algunos consejos que pueden ayudar a reducir o a eliminar las bolsas debajo de los ojos:

  • Aplicar una compresa fría. Humedecer un paño con agua fría y mientras se esté sentado, se aplica el paño húmedo sobre la piel debajo de los ojos y alrededor de estos durante unos minutos ejerciendo una leve presión.
  • Limitar el consumo de líquidos antes de acostarte y de sal en tu dieta. Esto reducirá la retención de líquidos que puede causar bolsas bajo los ojos.
  • No fumar. Fumar puede agravar el problema de las bolsas debajo los ojos.
  • Dormir con la cabeza ligeramente elevada. Puede ser útil agregar otra almohada o levantar la cabecera del colchón. O bien, elevar unas pulgadas toda la cabecera de la cama. Esto ayuda a evitar que el líquido se acumule alrededor de los ojos mientras duermes.
  • Reducir los síntomas de alergia. Evitar los alérgenos cuando sea posible. Por ello es ideal probar medicamentos de venta libre para la alergia. Hablar con el proveedor de atención médica acerca de las estrategias de prevención si se tienen reacciones debajo del ojo debido a tintes para el cabello, jabones, productos cosméticos u otros alérgenos.
  • Usar productos cosméticos. Maquillar las bolsas de los ojos es otra recomendación.

De otro lado, la entidad sin ánimo de lucro también reveló que varios tratamientos para las arrugas se usan para mejorar el aspecto de la hinchazón debajo de los ojos. Entre ellos se encuentran la exfoliación por láser, la exfoliación química y los rellenos faciales, que pueden mejorar el tono de la piel, estirarla y rejuvenecer la zona debajo de los ojos.

No obstante, indicó que para las personas con piel negra o morena, la exfoliación por láser implica el riesgo de cambios permanentes en el color de la piel (hiperpigmentación o hipopigmentación).

Sin embargo, el Grupo Sanitas de España indicó que si las anteriores recomendaciones no surten efecto “y se tienen unas bolsas de ojos acusadas y permanentes, queda el último recurso: la cirugía, utilizando una técnica que se conoce con el nombre de blefaroplastia.

La blefaroplastia se trata de una intervención con un alto grado de seguridad. Primero se procede a eliminar la grasa, los líquidos y otras sustancias que puedan haberse acumulado en las bolsas, lo que reduce de forma inmediata la hinchazón. Posteriormente, siempre que la piel haya adquirido flaccidez, se estira y se recorta la sobrante por un procedimiento que no dejará cicatrices”.

De todos modos, existen algunos efectos secundarios de la cirugía como: ojos secos, ojos llorosos, dolor, hinchazón, moretones y visión borrosa.

Adicional, entre las complicaciones poco frecuentes se encuentran pérdida de visión, sangrado, infección, lesión de los músculos del ojo, abrasión de la córnea y caída de un párpado.

Dicho lo anterior, hay que resaltar la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.