La congestión nasal, comúnmente conocida como nariz congestionada o tapada, ocurre cuando los tejidos que recubren la nariz se inflaman debido a diversas causas. Estas causas, de acuerdo con el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre (NHLBI) de Estados Unidos, pueden incluir:
- Infecciones Respiratorias: uno de los motivos más frecuentes de congestión nasal es la infección del tracto respiratorio superior, como el resfriado común o la gripe. Los virus que causan estas infecciones pueden inflamar las membranas mucosas de la nariz y producir moco adicional, lo que conduce a la congestión.
- Alergias: las alergias a polen, ácaros del polvo, pelo de animales y otros alérgenos pueden provocar una respuesta inflamatoria en la nariz y los senos paranasales, lo que resulta en congestión nasal. Esto es comúnmente conocido como rinitis alérgica.
- Irritantes Ambientales: la exposición a irritantes como el humo del cigarrillo, la contaminación del aire, los productos químicos fuertes o incluso el aire seco puede irritar las membranas mucosas nasales y causar congestión.
- Cambios en la temperatura y la humedad: los cambios bruscos en la temperatura o la humedad ambiental pueden afectar las vías respiratorias y provocar congestión nasal en algunas personas.
- Problemas estructurales: anomalías en la estructura de la nariz, como un tabique nasal desviado o pólipos nasales, pueden dificultar el flujo normal del aire a través de la nariz y causar congestión crónica.
- Medicamentos: algunos medicamentos, como los descongestionantes nasales utilizados en exceso, pueden generar un efecto rebote que empeora la congestión nasal.
- Síndrome del Resfriado Común: este síndrome se caracteriza por congestión nasal crónica sin una causa específica identificable y puede ser el resultado de una respuesta inflamatoria crónica.
- Enfermedades crónicas: enfermedades como la rinitis crónica, la sinusitis crónica o la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) pueden causar congestión nasal persistente.
Remedios caseros para combatir la congestión nasal
Solución salina nasal
De acuerdo con el NHLBI, la solución salina nasal ayuda a limpiar y humectar las fosas nasales, aliviando la irritación y la congestión.
- Preparación: mezcle 1 cucharadita de sal en 8 onzas de agua tibia y luego use un cuentagotas o una botella de irrigación nasal para aplicar la solución en cada fosa nasal.
Inhalación de vapor
La inhalación de vapor ayuda a descongestionar las vías respiratorias y alivia la irritación de la garganta, de acuerdo con el NHLBI.
- Preparación: llene un recipiente grande con agua caliente y añada unas gotas de aceite de eucalipto o menta. Cubra su cabeza con una toalla e inhale el vapor durante unos 10-15 minutos.
Té de jengibre
El jengibre tiene propiedades antiinflamatorias y puede ayudar a reducir la congestión nasal.
- Preparación: ralle una pequeña cantidad de jengibre fresco y hiérvalo en una taza de agua durante unos 10 minutos. Beba el té caliente con miel y limón.
Comer alimentos picantes
Según el NHLBI, los alimentos picantes, como el chile, pueden abrir las vías nasales y reducir la congestión.
- Aplicación: agregue una pizca de chile rojo o pimienta de cayena a sus comidas para experimentar un alivio temporal de la congestión.
Si bien estos remedios caseros pueden brindar alivio temporal, es importante recordar que no todos funcionarán igual para todas las personas. Si la congestión nasal persiste o empeora, se recomienda consultar a un profesional de la salud para obtener un diagnóstico adecuado y un tratamiento más específico.