El desayuno, como bien se sabe, es la comida más importante del día, por eso, se debe componer de alimentos que le otorguen al organismo diferentes nutrientes. Es de vital relevancia no ingerir en las primeras horas de la mañana productos cargados con grasas dañinas.
“Esta es una de las comidas más importantes del día, ya que proporciona la energía y nutrientes necesarios para encarar las actividades de la jornada. El desayuno permite hidratar el cuerpo, evita los efectos de un ayuno prolongado y reorganiza los cambios metabólicos que se dan durante la noche”, señala el portal web Canal Salud.
En lo que corresponde a las personas con diabetes tipo 2, estas deben tener un mayor cuidado con lo que consumen o no en el desayuno. Por ejemplo, aunque parezca obvio, una de las sustancias que no se pueden incluir en esta comida es el azúcar, porque incrementa los niveles de glucosa en la sangre, empeorando la enfermedad.
En este sentido, los alimentos o productos cargados de azúcar como, por ejemplo, las bebidas de botella comercial, los productos de paquete, entre otros más, se deben evitar a toda costa.
Otra de las sustancias que las personas con diabetes tipo 2 deben eliminar del desayuno y en lo posible de su ingesta diaria, es el sodio/sal, ya que, la afección en cuestión afecta de gran manera a los riñones, y estos, con el paso del tiempo pierden la capacidad de controlar el equilibrio de sodio y agua.
Entonces, ¿cuál es el desayuno ideal para una persona con diabetes tipo 2? Pues bien, el Medical News Today reveló cómo se debe componer esta comida para los individuos con la afección mencionada. El sitio resalta que en el desayuno se deben incluir batidos, avena, huevos, cereal y frutas.
En primer lugar, “un batido hecho en casa ofrece el mismo sabor dulce que el jugo (pre-fabricado), pero también puede proporcionar nutrientes que impulsan la salud en general y ayudar a contrarrestar el hambre”, explica la plataforma.
Por su parte, la avena es un alimento que contiene mucha fibra, lo que tiene varios beneficios para el cuerpo. Por ejemplo, puede ayudar a disminuir la cantidad de azúcar que se absorbe en la sangre, mejorar la digestión y reducir el apetito. Por eso, la avena es una buena alternativa para incluir en el desayuno, ya que, aporta muchos nutrientes importantes. No obstante, es importante tener en cuenta cómo se prepara y qué ingredientes se le agregan, para no comprometer sus propiedades saludables.
En cuanto a los huevos, “según un estudio de 2015 en hombres entre 42 y 60 años, aquellos que comían más huevo tenían 38 por ciento menos probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2 que los que comían menos huevo, a pesar del contenido de colesterol en este alimento”, agrega el sitio.
Asimismo, incluir cereales con fibra en la dieta puede ser beneficioso para regular los niveles de azúcar en la sangre de una persona. Sin embargo, es importante tener en cuenta que muchas marcas de cereales populares contienen altas cantidades de azúcar y pocas cantidades de fibra, incluso aquellas que los fabricantes promueven como saludables.
Por ello, es importante leer detenidamente las etiquetas nutricionales de los cereales antes de comprarlos, para asegurarse de que se están adquiriendo opciones con un adecuado contenido de fibra y bajos en azúcar añadida.
Y por último, “las frutas enteras pueden ser una excelente opción para el desayuno, especialmente con yogur, muesli o avena. El aguacate da sensación de saciedad y ofrece aproximadamente 10.10 g de fibra y menos de 1 g de azúcar por taza de 150 g”, concluye el Medical News Today.
Es importante consultar con un profesional de la salud antes de agregar un determinado alimento al desayuno o a la dieta en general.