La grasa corporal es uno de los principales componentes del organismo y cumple funciones importantes como proteger los órganos, cubrir las articulaciones, controlar la temperatura y almacenar vitaminas, además de ser una fuente de energía.
Sin embargo, la cantidad y el lugar en el que se ubica son fundamentales para determinar si altera o no la salud. En el caso de la grasa acumulada en el abdomen no solo es un molesto factor estético, sino que puede convertirse en un indicador de riesgo para la salud, señala el instituto de investigación clínica Mayo Clinic.
Esta grasa comienza a acumularse si una persona no sigue una dieta balanceada y equilibrada, pero si además no realiza actividad física de manera regular. La grasa abdominal puede ser subcutánea o visceral. La primera es la que la persona puede sentir si pellizca el exceso de piel y tejido en la parte media del cuerpo; la segunda es la que se acumula en el abdomen en los espacios entre los órganos. El exceso de grasa visceral se relaciona estrechamente con un mayor riesgo de sufrir problemas graves de salud, precisa esta institución.
Modificar los hábitos alimentarios es primordial para ayudar a reducir la grasa. Lo ideal es incluir diariamente alimentos saludables en la dieta. Además, es recomendable minimizar el consumo de comidas industriales, frituras y aquellas con alto contenido en grasas, además del alcohol y el tabaco.
En este proceso existen algunos alimentos que pueden ayudar a combatir el exceso de la grasa localizada en el abdomen de manera natural.
Plátano: de acuerdo con el portal Mundo Deportivo, esta fruta es ideal si se quiere ayudar a bajar algunos kilos. Al ser un alimento rico en fibra, ayudará a mejorar el tránsito intestinal, a que el cuerpo absorba menor cantidad de azúcares y así mismo tener mayor saciedad. De igual manera, el plátano también es rico en potasio, vitamina B6 y C, magnesio y manganeso.
Aguacate: por lo general se asocia esta fruta al consumo de calorías. No obstante, es importante tener en cuenta que agrega al organismo una gran cantidad de colesterol bueno (HDL), por lo que anulará el efecto que tiene el colesterol malo (LDL) y así se verá beneficiada la salud cardiovascular. A esto se le suma que aporta gran cantidad de fibra, vitamina E y potasio.
Tomate: este es un alimento con gran cantidad de calorías y aporta muchos minerales, fibra y vitaminas. Los expertos recomiendan su consumo, pues es diurético, desintoxicante y antioxidante, por lo que es ideal para una pérdida de peso efectiva.
Manzana: además de tener una baja cantidad de calorías, es muy rica en fibra, lo que sacia rápidamente. Aporta al cuerpo vitamina C, flavonoides y betacaroteno. Un estudio publicado en 2015 entre 124.000 personas, reveló que quienes comían manzana cada día perdieron un promedio medio kilo más en un período de cuatro años.
Cerezas: estas pequeñas frutas rojas ayudan a conciliar el sueño por la serotonina y melatonina que contienen; además, son fuente de una alta cantidad de vitaminas A y C.