Sin duda, las canas son inevitables y algo totalmente natural que se produce al envejecer. Para algunos es motivo de orgullo por mostrar una edad de madurez, pero para la mayoría son una molestia que quisieran evitar a toda costa.

El jefe clínico de la división de reumatología del Centro Médico Beth Israel Deaconess y miembro actual de la Facultad de Medicina de Harvard, Robert H. Shmerling, explica que las canas salen “a medida que van envejeciendo los folículos pilosos, que son los que marcan el compás del color. De ahí que cada pelo vaya naciendo de forma gradual con una menor intensidad de color”.

Además, agrega que es completamente normal que una persona después de los 35 años tenga canas, ya que “los folículos pilosos producen menos color a medida que envejecen”.

Generalmente, aparecen con el paso de los años, pero algunas veces nacen de manera prematura, gracias a distintos factores como el estrés, el ambiente, químicos, o por cuestiones genéticas.

Incluso, científicos de la Universidad de Harvard indican que, al someter el organismo en situaciones de estrés, el número de células madre de los melanocitos disminuye rápidamente, provocando el tono blanco en las fibras capilares.

Los niveles bajos de vitaminas del grupo B y D3 pueden disminuir la producción de melanina en el cuerpo. Foto GettyImages. | Foto: Gettyimages

Por otro lado, un estudio publicado en Nature Communications reveló que existe un gen relacionado con el encanecimiento del cabello. Este gen, también conocido como IRF4, está involucrado en la regulación de la producción y el almacenamiento de la melanina.

Además, los niveles bajos de vitaminas del grupo B y D3 pueden disminuir la producción de melanina en el cuerpo. La melanina también es la encargada de dar pigmentación al cabello. Los expertos indican que su aparición es señal de que hay una deficiencia en vitamina B12, vitamina D3, ácido fólico, hierro y zinc.

Asimismo, algunas deficiencias nutricionales pueden favorecer su aparición prematura. Por esa razón, el portal especializado en salud Cuerpo y Mente comparte cuáles nutrientes pueden estar faltando para que se produzca antes de lo esperado:

Vitamina B5

  • Las vitaminas del grupo B se consideran vitaminas de la belleza porque contribuyen a un cabello fuerte y saludable.
  • Esta vitamina es responsable de importantes procesos metabólicos en la raíz del cabello y previene la inflamación del cuero cabelludo.
  • Por lo tanto, un suministro insuficiente de B5 puede provocar el envejecimiento del cabello.
  • Si esta falta, lo más probable es que también le falten otras vitaminas B, lo que se refleja en la pérdida de cabello, además de la falta de pigmentación.

Vitamina B12

  • La falta de vitamina B12 también puede ser responsable de la pérdida de color.
  • Esta vitamina B12 participa en la producción de energía a partir de los alimentos y es esencial para el bienestar del sistema nervioso.
  • También es vital para el crecimiento celular, la formación de glóbulos rojos, y la división celular. Síntomas de su deficiencia son una sensación de anemia, cansancio, desánimo y mareos.
  • Aunque los huevos y los lácteos aportan pequeñas dosis de vitamina B12, no son suficientes para las personas que siguen una dieta vegetariana.
  • Para dichas personas se recomienda tomar un suplemento semanal de 2.000 mcg de cianocobalamina.

Vitamina D

  • El cabello también se benefician de la vitamina solar.
  • Por ejemplo, potencia la fase de crecimiento del ciclo capilar. Si hay una insuficiencia severa de la vitamina, la producción de melanina se interrumpe y el cabello se vuelve gris.
  • Los primeros signos de una deficiencia de esta vitamina es el cabello seco y su caída, así como los dolores corporales y el cansancio.
  • Para evitar esto, se recomienda exponer la cara y los brazos al sol durante unos 15 minutos diarios.

Ácidos grasos omega-3

  • Una cantidad suficiente de ácidos grasos omega-3 en la dieta pueden tener un efecto positivo en la salud y el crecimiento del cabello.
  • Los ácidos grasos se utilizan para construir membranas celulares y protegerlas. Para el cabello, suficiente omega-3 significa más protección de los pigmentos, grosor y luminosidad.
  • Además del pescado y la dieta a base de vegetales, las fuentes más ricas en omega-3 son las nueces y el aceite de lino.