Uno de los problemas que más ha ido en aumento por esta época de navidad son los casos de intoxicación registrados a nivel nacional sobre el consumo de licores adulterados. Como tal, esta situación se incrementó en este mes de diciembre debido a los tradicionales festejos, celebraciones y rumbas de la temporada.
De acuerdo con el médico especialista en toxicología, Luis Carlos Rojas Rodríguez, explicó para el portal web El País, la intoxicación por licor fraudulento no es la más frecuente en el mes de diciembre, pero es una de las más severas. No obstante, cuando ocurren varios casos al tiempo, lo que epidemiológicamente se conoce como “brote”, son un grupo de personas que se exponen a esta sustancia tóxica al estar en una misma celebración.
En cuanto a la sintomatología de una intoxicación por licor, el docente de la Universidad del Rosario señaló que son difíciles de diferencia con una intoxicación por alcohol etílico. No obstante, hay señales que pueden diferenciar una de la otra como, por ejemplo, el dolor de cabeza intenso, visión doble o borrosa y el cuadro de embriaguez es más tardío. Por lo tanto, si se presentan estos síntomas, es importante acudir de inmediato a urgencia para recibir atención.
Normalmente, el tiempo en los que se presentan los síntomas de la intoxicación también pueden variar de persona a persona. Por ejemplo, hay personas que los síntomas inician entre 6 u 8 horas después de haber ingerido algunas bebidas adulteradas, pero también hay personas que pueden presentar los síntomas hasta 24 y 36 horas después de la ingesta.
Tratamiento de intoxicación por trago adulterado
En cuanto al tratamiento médico para estos casos, todo depende del tiempo que haya pasado desde la toma del alcohol adulterado y de las condiciones en que llegue el paciente al centro médico.
Por una parte, se pueden aplicar medidas como antídotos, medicamentos o tratamientos como la hemodiálisis, con los que se busca eliminar rápidamente la sustancia tóxica del cuerpo y disminuir el daño que puede provocar en la persona.
Las bebidas adulteradas generalmente son elaboradas con metanol, un alcohol que no es apto para el consumo humano y que se realiza en otros escenarios como la fabricación de combustibles.
Al respecto, el doctor Rojas, toxicólogo de la Clínica Country explica que “cuando el metanol entra en nuestro organismo se convierte en una sustancia muy tóxica que se llama ácido fórmico, el cual produce varios problemas: afecta la retina y al nervio óptico, lo que hace que la persona desarrolle ceguera. Lo otro es que puede alterar el sistema nervioso central, o sea, el cerebro: puede dañar varias áreas de este que pueden provocar movimientos anormales como temblores e incluso, convulsiones, una de las causas de muerte que tienen estos pacientes”.
Para comprender la composición de esta bebida, es necesario detallar que el ácido fórmico puede ocasionar lesiones renales y dañar diferentes estructuras del cuerpo que podrías provocar la muerte de la persona afectada.
Entre tanto, los diversos síntomas que se presentan se dan a nivel del “sistema nervioso central, tales como cefalea (dolor de cabeza intenso que no se ha experimentado con anterioridad), deterioro del estado de conciencia, somnolencia, la persona puede terminar en coma. También tener un cuadro convulsivo. Adicionalmente, en el ámbito visual se presenta lo que es conocido como efecto de ‘tormenta de arena’, que es una visión borrosa y hay disminución de la agudeza visual”, aseguró el doctor Maurix Fernando Rojas, toxicólogo del Hospital Universitario del Valle.
Ahora bien, si la persona logra sobrevivir a la intoxicación, esto puede acarrear secuelas como la ceguera, que es uno de los síntomas más frecuentes. Asimismo, los movimientos anormales como los temblores o movimiento de las extremidades también se pueden presentar.