El preinfarto se da cuando hay un funcionamiento incorrecto en el músculo cardíaco conocido como miocardio. Por lo general, dicha falla genera un dolor bastante fuerte en el pecho que se produce porque el corazón no está recibiendo la suficiente sangre, por lo que no bombea la misma cantidad al resto del cuerpo.

De acuerdo con MedlinePlus, portal alimentado por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, la falla del músculo provoca un dolor fuerte en el pecho y, de no controlarse, se puede dar con frecuencia. Esta afección sería la más compleja debido a que no tiene un patrón para actuar y suele considerarse como un aviso a un futuro infarto.

Cuando esto sucede es preciso que los afectados acudan a un médico para que el cardiólogo brinde el acompañamiento y tratamiento necesario.

De acuerdo con el portal especializado Mejor con Salud, los síntomas de un preinfarto incluyen: fatiga, debilidad, ansiedad, desmayos, transpiración, náuseas, mareos, dificultad para respirar, malestar, dolor de brazos, cuello, mandíbula, hombros o espalda. Sobre la misma línea el portal subrayó que las mujeres pueden sentir síntomas diferentes. En general suelen sentir punzadas, náuseas, dificultad respiratoria o dolor abdominal.

Por lo general, a los pacientes propensos a sufrir preinfartos o infartos se les recomienda una dieta saludable baja en grasas saturadas, azúcares, entre otras cosas.

¿Qué alimentos se deberían consumir para evitar esta afección?

Alberto Vázquez reseña en un artículo publicado en la edición número 115 de la revista Salud y Corazón de la Fundación Española del Corazón los 10 alimentos que más benefician a este órgano vital, los cuales podrían evitar la llegada de un infarto y son descritos a continuación:

1. Nueces: Sus altos niveles de ácidos grasos Omega-3 son ideales para cuidar la salud del corazón, es tildado por el especialista como un alimento “estelar”.

2. Brócoli: Este vegetal es rico en ácido fólico, zinc, hierro, calcio, vitamina K, antioxidantes, lo que lo convierten en un alimento ideal para reducir el riesgo de accidentes vasculares.

3. Chocolate negro: Ayuda a restaurar la flexibilidad de las arterias y evita que los leucocitos se peguen a las paredes de los vasos sanguíneos.

4. Fresas: Los flavonoides presentes en este fruto de color rojo contribuyen en la dilatación de las arterias, protegen el endotelio (la capa interior de los vasos sanguíneos) y controlan la tensión arterial.

5. Curry: La curcumina, un potente antioxidante presente en este condimento, reduce las probabilidades de sufrir insuficiencia cardíaca e hipertensión por sus propiedades antiinflamatorias.

6. Té verde: Vázquez afirma que tan solo una o dos tazas de té verde al día ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares, pues contribuyen en la disminución de los niveles altos de grasa en la sangre.

La infusión de té verde ayuda a reducir los niveles de grasas en la sangre. | Foto: Getty Images

7. Aceite de oliva: La Fundación Española del Corazón describe que la ingesta diaria de aceite de oliva ayuda a proteger la salud cardiovascular debido a su contenido de ácidos grasos y antioxidantes.

8. Salmón: Ayuda a reducir los niveles de colesterol y triglicéridos e incrementa la fluidez de la sangre, al mejorarse la elasticidad de las paredes arteriales.

9. Vino tinto: El etanol y los polifenoles tienen efectos beneficiosos sobre las moléculas inflamatorias causantes de la ateroesclerosis.

10. Legumbres: Diferentes estudios avalan que sus proteínas de excelente calidad y su poca grasa favorecen unos saludables niveles de colesterol en sangre.