Querido hijo:  Te mando esta carta a través de la revista SEMANA. Hijo, espero que te encuentres bien de salud y le doy gracias a Dios por estas pruebas de supervivencia que he recibido. Las he recibido con mucha alegría, pero a la vez tristeza de verlos en el estado en que se encuentran, en especial por el desgaste físico. Sigo con la fe y esperanza de que vas a estar muy pronto aquí en casa. Recibe muchas saludes de tu papá, de todos tus hermanos, de todos tus sobrinos y todos tus tíos y tías que están muy contentos de verte en el video. Recibe todo mi cariño y mi amor, te mando un abrazo y un beso a través de la distancia. Yo sigo orando por tu libertad y para que Dios y la Virgen te bendigan y te guarden hasta tu regreso a casa. Siempre ten mucha fe en Dios y mucha fortaleza.   Un abrazo para todos los secuestrados, los recordamos y oramos muchos por ellos.   Tu mamá, Griselda Medina