MASACRE

12 de septiembre de 1994

Las autoridades se encuentran hondamente preocupadas por el escalofriante número de obreros de la construcción asesinados en Cali durante los últimos meses. Se habla de más de 150 sólo durante el mes de julio, cifra significativa si se tiene en cuenta que el total de obreros de la construcción muertos en 1993 fue de 230. La explicación que aventuran los organismos de seguridad y la propia Personería de la capital del Valle del Cauca es aún más macabra: al parecer, se trata de personas que participaron en la construcción de caletas y subterráneos en residencias de narcotraficantes, a quienes los mafiosos estarían asesinando para evitar que delaten a las autoridades la existencia y forma de los escondites. Un fenómeno similar se presentó en Medellín entre 1992 y 1993, cuando se intensificó la persecución a Pablo Escobar.