En el largometraje, Ron Howard (Frost/Nixon, Rush) explora la infancia, el ascenso y la popularidad de Luciano Pavarotti, así como su vida personal y su deseo de llevar la ópera al planeta entero. La producción incluye grabaciones inéditas del tenor editadas en los legendarios estudios Abbey Road, y más de 50 entrevistas con familiares, colegas y figuras de la música como José Carreras, Plácido Domingo y Bono. Traído por Cineco Alternativo, Pavarotti tendrá funciones del 16 al 22 de septiembre en Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla, Bucaramanga, Cartagena, Villavicencio, Ibagué, Manizales, Popayán, Armenia y Pereira. La boletería ya se encuentra en preventa. SEMANA habló con su director, Ron Howard. SEMANA: ¿De quién fue la idea de hacer un documental sobre Pavarotti? Ron Howard: En primer lugar, en Pavarotti participó el mismo equipo que trabajó en Eight Days a Week, sobre Los Beatles. Están Nigel Sinclair, Mark Monroe y Paul Crowder, con quienes tengo muy buena química. Los tres amamos a los Beatles, y el documental le gustó al público, así que empezamos a buscar otras historias. Sinclair me trajo la propuesta de un largometraje sobre Pavarotti, y me aseguró que la familia y la productora lo apoyarían. Me preguntó qué pensaba acerca de Pavarotti, y yo le confesé que no sabía mucho. Al final eso fue muy bueno, ya que aceptamos la propuesta y nos sumergimos en su vida, casi que como un grupo de estudio. Nos preguntábamos qué habíamos aprendido, leíamos sobre él. Así empezaron a surgir ideas para hacer una historia muy cinemática y fresca sobre su vida y su increible música. SEMANA: ¿Cómo fue el proceso de hacer Pavarotti: la voz, el hombre, el drama, la leyenda? R.H: Lo primero que tuvimos que hacer fue conseguir material de archivo. Afortunadamente, había mucho, sobre todo de sus increíbles presentaciones en vivo, así que las pude ver. Cuando trabajo con actores suelo hacer planos muy cerrados. Pero los acercamientos al rostro y las expresiones de Pavarotti elevan al espectador. También empecé a ver que cuando lees la letra de las canciones que interpreta, de las arias, logras entender el drama detrás de cada canción. Por eso nos pusimos a la tarea de conseguir grandes presentaciones de cada época en la que él estaba viviendo algo similar a lo que cantaba. Así que las canciones ya no solo te sacan un “¡Mira, qué gran artista es Pavarotti!”, también te permiten ver lo emocional que puede llegar a ser su música. Por eso, conseguir estas presentaciones que se relacionan con su vida se convirtió en una premisa creativa fundacional que se mantuvo en mi cabeza mientras hacíamos la historia.

SEMANA: Usted ya mencionó el documental sobre Los Beatles que hizo antes de este: ¿en qué se asemeja la historia de Pavarotti a la de los cuatro de Liverpool? R.H: Hay ciertos paralelos entre la historia de Pavarotti y la de Los Beatles. ¿Quién se imaginaba que estos chicos de Liverpool podrían llegar a cautivar a todo el mundo? Sin embargo, lo de Pavarotti es, en cierto modo, incluso más extraordinario: hizo que la ópera fuera redescubierta. Y esto lo elevó más con la inclusión de Plácido Domingo y José Carreras para conformar ‘Los Tres Tenores‘. Aunque en principio fue un acto de bondad llevar a Carreras a la tarima con él, la sensación de novedad y el espíritu de colegas que despertaba su música fue algo muy poderoso que, como a Los Beatles, los convirtió en el acto más grande del mundo en su momento. Es inusual que se den esos paralelos. Además, la creatividad no es algo que se pueda ‘manufacturar’. La gente se compromete con un tipo de arte, se expresa a través de él y, una vez cada mucho tiempo, hay un quiebre. Pavarotti fue uno de estos quiebres.

SEMANA: ¿Cómo reaccionó la familia de Pavarotti ante la idea del documental? R.H: No hubiésemos hecho el documental sin la cooperación de su familia. No es mi naturaleza hacer una película como la haría un fan y, afortunadamente, ellos entendieron que habían algunos aspectos de la vida de Pavarotti con los que podría ser difícil lidiar de nuevo. Estuvieron comprometidos con darnos entrevistas muy íntimas, y nos compartieron videos y fotografías que no habíamos visto antes. El material que nos ofrecieron era, en su mayoría, muy personal, y eso nos permitió reflexionar sobre lo que significaba vivir junto a Luciano Pavarotti, hacer parte de su familia. Ahora que lo pienso, la verdadera razón para hacer la película fue compartir la historia de Pavarotti y permitir que este fuera fiel para muchas audiencias.

SEMANA: ¿Qué aspecto de la vida de Pavarotti fue el que más lo marcó? R.H: Lo más inspirador de su historia es la alegría que tenía por la vida. Su gran apetito por la comida, sus romances, el arte, los caballos, la filantropía y el amor que sentía por sus hijas. Y todo eso lo conseguía siempre dando. Así vivió su vida, todo era recíproco. Era extrovertido, vivía a lo grande, y en parte lo hacía porque no todo lo que conseguía era para él. Pavarotti compartía momentos y experiencias, daba regalos y los regalos volvían a él, y eso inspira. Por eso fue un gran artista, y esa es la razón por la que en todas las entrevistas que dio la gente le expresaba nada más que amor y respeto. A pesar de estar decepcionados por algunas acciones de su pasado, que él también lamentó, la gente deja al lado estos remordimientos porque saben lo que significó estar al lado de un hombre tan memorable. SEMANA: La edición de sonido se llevó a cabo en los legendarios estudios Abbey Road, y contó con Chris Jenkins, tres veces ganador del Oscar. ¿Qué sumó Jenkins a esta obra? Chris Jenkins es un gran mezclador de películas. Trabajé con él muchas veces, incluso en la historia de Los Beatles. Cuando supo que iba a hacer el documental de Pavarotti, me llamó y me dijo: “No pienses en nadie más para mezclar esta película”. Sabía que Jenkins la llevaría a un nuevo nivel, no sólo en lo técnico, también haciendo que la voz de Pavarotti sonara orgánica para las audiencias. Jenkins trajo todo su talento a este proyecto, y fue fundamental para hacer sentir algo más a quienes aman la ópera, algo que no sabían que podían sentir. La ópera es una gran manera de contar historias, y descubrí que sus temas son fieles a la naturaleza humana, y que la música no sólo es notable, también expresa emociones e ideas de una manera única. De repente, no tenía que escuchar más ópera porque mi trabajo en la película había terminado, pero seguía escuchándola. Seguramente descubrí algo. El documental se presentará del lunes 16 de septiembre al domingo 22. Más información, aquí.