LA NUEVA NARRATIVA
El premio "Plaza y Janes" constituye una novela plenamente lograda.
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Pero sigo siendo el rey. David Sánchez Juliao. Plaza y Janés. 269 páginas. Bogotá 1983.
El primer premio Plaza y Janés, 1983, de novela colombiana pone a David Sánchez Juliao en una posición privilegiada en lo que podríamos llamar la nueva narrativa colombiana. Un lugar ganado a fuerza de trabajo, de constancia, de pasión de talento. La verbosidad que fluye naturalmente de este costeño locuaz, desmedido y ambicioso, a través de las entrevistas, la cátedra y su "literatura oral", es ese mismo torrente verbal con que va construyendo -con apasionante rigor- un mundo novelesco que se arraiga con insólita fuerza en el sentimiento popular de América Latina. "Pero sigo siendo el rey", que es sólo la primera de una ambiciosa trilogía con ánimo totalizador, tiene como escenario una ciudad imaginaria de México donde aparece una bandada de palomas rojas siempre que un hecho grave va a suceder. Tejida con elementos dispares, propios del cine, esta novela entronca, por una parte, con los afanes de innovación de la narrativa contemporánea latinoamericana y, por otra, con esa tradición de la que brota justamente lo mejor de la literatura de nuestro continente. Un aliento de superchería, de deliciosa truhanería y de ranchera ruidosa recorre gozosamente un texto literario plenamente logrado.