LATINOAMERICA EN PARIS

De manera patente París acaba de probar que es la capital cultural de América Latina. Bajo la alta claraboya que cubre los doce mil metros cuadrados del palacio de los Campos Elíseos, se llevó a cabo entre el ocho y el quince de diciembre, la más importante manifestación plástica latinoamericana en Europa.
Organizada por la asociación "Derechos Socialistas del Hombre", la exposición contó con la participación de casi trescientos artistas de doce países y reunió 1300 cuadrados, 150 esculturales y 150 fotografías.
Personalidades tan diversas como Julio Cortázar, Carlos Altamirano o Miguel Antel Estrella, patrocinaron la semana dedicada a América Latina, lo que permitió igualmente organizar debates sobre el teatro, la novela, el exilio, la mujer y la literatura latinoamericana. Unos veinte escritores así como varios especialistas franceses y latinoamericanos (Claude Couffon, Elena Arau, Augusto Boal, Eduardo Galeano, Bareiro-Saguier, Olver de Leon) participaron en las discusiones mientras que los espectáculos musicales fueron realizados por grupos como "Cobra", "Malambo Latino" y "Bolivia Manta", así como por artistas como Isabel Parra y Daniel Viglietti.
Sorprendidos, los pintores y escultores comprobaron que la exposición a pesar de haber sido organizada por una asociación humanitaria "socialista", había sido acogida favorablemente por los grandes nombres de la pintura latinoamericana residentes en París.
Así, al lado de Wilfredo Lam, Rodolfo Krasno y Alicia Peñalba, fallecidos recientemente, figuraban Jesús Soto, Roberto Matta, Antonio Segui, Julio Le Parc. José Balmes, Ester Chacón, Luis Zilveti, José Gamarra, Flavio Shiro, Cristina Rubalcava... y veintidós colombianos. (ver recuadro). "Sinceramente, no me esperaba ese nivel tan importante" nos comentó el maestro venezolano Soto.
El argentino Antonio Segui, autor del cartel de la exposición, nos dijo por su lado: "es una manifestación de primera línea. Su nivel medio es superior al de la FIAC. La exposición no sólo prueba que hay un grupo de pintores y escultores trabajando seriamente en París, sino que demuestra que la creación plástica latinoamericana se distingue por su juventud, su fuerza, su vitalidad y su locura".
ROMPIENDO BARRERAS
En general, los artistas han destacado la importancia que ha tenido esa inmensa exposición para ellos mismos. Como García Márquez, los pintores y escultores han afirmado que es en París, gracias a tales eventos, que han conocido a América Latina. "De muchos pintores yo conocía una o dos obras pero en esta exposición he podido ver seis u ocho cuadros de cada uno. Así he podido situarlos y hacerme una idea más precisa de lo que hacen", dijo a SEMANA José Gamarra. En el mismo sentido, Soto --uno de los raros latinoamericanos mundialmente reconocidos-- nos confesó abiertamente: "sesenta por ciento de los pintores que exponen no los conocía. Ahora me resultará mucho más fácil seguir las actividades de los artistas latinoamericanos ".
La exposición ha contribuido, pues, a hacer saltar las barreras que han mantenido absurdamente compartimentado el continente, barreras que los artistas habían reproducido en París. Unos por ser exiliados. Otros por ser argentinos o brasileros. Unos por ser "cinéticos" o hacer parte de la "figuración libre", otros por ser más o menos militantes.
En este sentido, la exposición del Grand Palais podría acelerar el proceso de integración y la formación de un polo plástico latinoamericano en París, iniciado hace dos años por el "Espacio Latinoamericano".
Creado por once artistas provenientes de cinco países, el "Espacio Latinoamericano" ha realizado varias exposiciones, una de las cuales logró reunir 125 pintores y escultores de toda América Latina.
Cabe señalar, asímismo, el espíritu de la exposición que abrió las puertas a unos cincuenta jóvenes pintores, algunos de los cuales son prácticamente desconocidos en sus propios países. Interrogado sobre la calidad de esos artistas, Soto se limitó a afirmar: "La relevo está asegurada".
LAS MUJERES ARTISTAS
De la misma manera, se pudo apreciar que la participación de la mujer, lejos de constituir "la excepción", es un hecho importante que se ha extendido a todo el continente. En medio de casi 50 mujeres que participaron en la exposición, figuran creadoras profesionales como Alicia Peñalba, Virginia Tentido, Gracia Barrios, Mónica Bunster, Cristina Rubalcava, Felicia Sewicki, Ester Chacón, Gina Pellón, Emma Reyes, Gloria Uribe, Marta Loto y Ofelia Rodríguez. Profundamente satisfechos, los principales artistas latinoamericanos, en particular los que hacen parte de la Asociación Cultural Latinoamericana (ACAL), creen que en adelante todos los esfuerzos deben ser encaminados hacia la realización de una gigantesca exposición en la nueva catedral de la cultura francesa: el Centro Pompidou.
Algunos piensan que con un criterio de selección más drástico y con la participación de sus antecesores, como Torres García, Rufino Tamayo, por ejemplo, la exposición permitiría dar a conocer, a nivel internacional, la creación plástica latinoamericana en su conjunto. Por su importancia, el Centro Pompidou facilitaria una amplia difusión evitando así el boicoteo --más que relativo según los organizadores del que ha sido objeto la exposición latinoamericana por parte de los medios de comunicación en Francia.
Para esa exposición --que podría llevarse a cabo antes de 1985-- los artistas cuentan con una buena "palanca" en el gobierno: Jack Lang, ministro de la Cultura, quien después de visitar el palacio de los Campos Elíseos confesó nuevamente su admiración por la creaciónlatinoamericana.-
LOS COLOMBIANOS
Veintidós artistas participaron en la exposición: Ramiro Arango, Oscar Arcila, Antonio Barrera, Heriberto Cogollo, Gregorio Cuartas, Beatriz Duque, Alvaro Garzón, Diego Mazuera, Rafael Penagos, Emma Reyes, Francisco Rocca, Ofelia Rodríguez Salustiano Romero, Alberto Sojo, Beatriz Angel, Jairo Téllez, Gloria Uribe, Alvaro Valbuena, Tiberio Vanegas, Gustavo Bejarano, Elsa Zambrano y Patricia Zea.