Los organizadores de los Grammy pospusieron este miércoles la gala de los premios musicales que estaba prevista para el 31 de enero, por la “incertidumbre en torno a la variante ómicron” que ha hecho aumentar los casos de covid-19 en Estados Unidos las últimas semanas.

“Hacer el show el 31 de enero implica demasiados riesgos”, según un comunicado de la Academia de Grabación estadounidense, que añadió que anunciará “pronto” una nueva fecha para la ceremonia.

La variante ha provocado que los casos de covid-19 se disparen en todo Estados Unidos en las últimas semanas. El condado de Los Ángeles reportó casi 45.000 nuevos casos durante el sábado y el domingo, tras un récord diario de 27.091 nuevas infecciones el viernes. El martes también se confirmaron otros 21.790 casos.

Nominados

Justin Bieber, Billie Eilish y Olivia Rodrigo lideran la lista de estrellas nominadas para los premios Grammy, los más importantes de la música estadounidense.

Pero es el músico de jazz y rhythm and blues (R&B) Jon Batiste -estrella televisiva, líder de una banda musical y con un Oscar por la banda sonora de la película “Soul”- el que tiene más opciones de aumentar su colección de trofeos con lo más excelso de los Grammy, ya que suma once nominaciones en las máximas categorías.

La megaestrella canadiense Bieber optará a ocho premios en la gala que se celebrará el 31 de enero la metrópolis californiana, así como la favorita de los R&B H.E.R. y la rapera Doja Cat.

Eilish aspira a siete premios, los mismos que Olivia Rodrigo, una exactriz del canal Disney que llegó al pop este año con su éxito “drivers license (carné de conducir)”.

A sus 18 años, Rodrigo es una de las favoritas con su primer álbum “Sour”.

Al igual que Eilish en 2019, Rodrigo tiene la posibilidad de hacerse con los trofeos en las máximas cuatro categorías. Una de ellas es Mejor Nuevo Artista, en la que compite con Kid Laroi, Japanese Breakfast, Saweetie y el hermano de Eilish, Finneas, entre otros.

En la categoría al mejor álbum de pop latino aspiran al premio los discos “Vértigo”, de Pablo Alborán, “Mis Amores”, de Paula Arenas, “Hecho a la Antigua”, de Ricardo Arjona, “Mis Manos”, de Camilo, “Mendó”, de Alex Cuba y “Revelación”, de Selena Gómez.

En la categoría de mejor música urbana, compiten Rauw Alejandro, Bad Bunny, J Balvin, Karol G, Alex Cuba y Kali Uchis.

Esta 64ª edición ha ampliado el número de nominados en sus categorías más prestigiosas, pasando de 8 a 10, ante las insistentes críticas por la falta de diversidad de los premios que otorga la Academia de la Grabación.

Batiste, director musical desde hace mucho tiempo del programa “The Late Show con Stephen Colbert”, se ha erigido en los últimos años en defensor de la justicia social y las protestas.

El artista afroamericano, nacido en una prominente dinastía musical de Nueva Orleans, competirá con el disco “We Are” y la canción “Freedom”.

Batiste, quien ya fue nominado a tres premios Grammy, se medirá con Justin Bieber y Rodrigo en las categorías más reputadas, como Álbum y Grabación del Año.

También está en la disputa en géneros como R&B, jazz, raíces estadounidenses y composición clásica contemporánea, además de competir en categorías como vídeo musical y banda sonora, ésta última por su trabajo en la aclamada película de Pixar “Soul”.

Super Bowl se mantiene

Por otra parte, a pesar del aumento de contagios, la Liga de Football Americano (NFL) ratificó este miércoles que el Super Bowl del próximo mes se llevará a cabo en Los Ángeles, según lo programado, pero confirmó que la liga consultó lugares alternativos para su disputa como parte de la planificación habitual del megaevento.

Un informe de la estación de televisión WFAA del área de Dallas dijo este miércoles que la NFL se había puesto en contacto con los Dallas Cowboys para saber si el estadio del equipo estaba disponible para albergar al evento el 13 de febrero, en caso de complicaciones con la situación dela pandemia en Los Ángeles.

El informe citó a una fuente no identificada de la gerencia de los Cowboys explicando que el ‘plan B’ de la liga se debía a preocupaciones por las posibles restricciones sanitarias que se pudieran tomar en el estadio de California, debido al aumento del contagios de covid-19.

*Con información de la AFP.