Compra de bonos sin límite: la medida de la Reserva Federal para frenar el impacto del coronavirus

Sin duda, la economía mundial sufrirá un duro golpe por cuenta del coronavirus, ya presente en al menos 173 países. Estados Unidos no es la excepción y por eso la Reserva Federal (FED) ha dictado una serie de medidas para enfrentar la crisis en materia de liquidez.

La compra de volúmenes ilimitados de deuda gubernamental es tan solo una de las acciones que contempla el gobierno de Donald Trump para mantener a flote la economía de la nación en los próximos meses. Pero además, el paquete de ayudas incluye la compra de bonos de Tesoro "en las cantidades necesarias para favorecer el buen funcionamiento del mercado", anunció la FED.

En un principio, la Reserva Federal puso topes a sus ayudas y dijo que invertiría al menos 500.000 millones de dólares en bonos del Tesoro y al menos 200.000 millones en títulos hipotecarios, pero con el avance de la pandemia los límites parecen desbordarse.

Además, el banco emisor señaló que pronto presentará un programa para prestar directamente a las pequeñas y medianas empresas (pymes), las más afectadas por el cierre de muchos sectores de actividad adoptado para intentar contener la propagación del virus.

"Mientras persiste una gran incertidumbre, se ha hecho evidente que nuestra economía enfrentará severas perturbaciones", dijo la FED en un comunicado, comprometiéndose a utilizar todas las herramientas disponibles para contener el daño. 

La tasa de desempleo podría llegar al 30 %

James Bullard, presidente del Banco de la Reserva Federal de Sant Louis, hizo una predicción alarmante durante una entrevista que concedió al medio Bloomberg. El funcionario dijo que la tasa de desempleo de Estados Unidos podría alcanzar el 30% en el segundo trimestre del año debido al cierre de empresas y fábricas. Dato que contrasta profundamente con el 3,6 % de desempleo que mantiene actualmente.  

A su vez, Bullard pronosticó que la tasa anual de crecimiento de la economía estadounidense podría caer en un 50 por ciento, lo que representaría una pérdida de ingresos de 2,5 tan solo en el segundo trimestre del año. 

*Con información de AFP