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Notas de economía de la semana

25 de noviembre de 2017

La Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) acaba de dar su veredicto sobre una de las integraciones empresariales más grandes e importantes de los últimos años. Se trata de la compra de la operación de ExxonMobil en la región (Colombia, Perú y Ecuador) por parte de Copec (dueño de Terpel). La unión de los dos grandes jugadores había despertado gran inquietud entre pequeños propietarios de estaciones de servicio (EDS) en Colombia, pues veían con preocupación la conformación de un actor dominante.

Después de casi un año de estudio, la SIC decidió objetar la compra del negocio de distribución de combustibles líquidos de Exxon Mobil Colombia por parte de Terpel y autorizar -con algunos condicionamientos- la adquisición de la parte de lubricantes.

En la práctica esto significa que Terpel deberá vender (en un plazo no mayor de 6 meses) a un competidor independiente el negocio de combustibles de Exxon Mobil. La Superintendencia consideró inconveniente, para la competencia, permitir que Terpel junte su red actual de 1.900 estaciones de servicio (220 de su propiedad y las restantes de sus afiliados) a las 765 de Exxon Mobil. Con esto, la compañía se habría hecho a más del 50 por ciento de las estaciones del país y de la capacidad de abastecimiento.

Por otra parte, la SIC permitió la compra del negocio de lubricantes de Exxon Mobil, con algunas condiciones. Terpel deberá vender la planta de producción de lubricantes que tiene en Bucaramanga y las marcas Maxter. Solo podrá quedarse con la planta de Exxon en Cartagena (que es mucho más moderna) y la marca Mobil que es la líder hoy en el país. Además, deberá levantar las exclusividades en la distribución y exhibición de lubricantes que haya pactado con sus EDS afiliadas.

 

El porqué del NO en Combustibles

La SIC consideró que la integración de Terpel y Exxon Mobil tenia “un alto potencial restrictivo de las condiciones de competencia actuales en la distribución de combustibles en Colombia”.

Esto se debe a que Terpel cuenta hoy con más de 1.900 estaciones de servicio (220 serían propiedad de la compañía y las restantes son de sus afiliados), que representan alrededor del 38 por ciento del mercado colombiano. Si se le sumaran las 765 de ExxonMobil, superaría las 2.660 lo que configuraría más de un 50 por ciento de participación en la distribución de combustibles. En Colombia existen alrededor de 5.000 estaciones.

Además, entre estas dos compañías estarían realizando más de dos terceras partes de las ventas en el mercado de distribución mayorista de combustibles líquidos (gasolina corriente, extra y diésel), representando un riesgo para la competencia. Esto se debe agregan cerca del 52 por ciento de la propiedad de las plantas de abastecimiento del país, infraestructura que resulta indispensable para el desarrollo de la actividad de distribución mayorista.

Por todas esas consideraciones, Terpel tendrá que vender de modo inmediato el negocio de combustibles de Exxon Mobil (Plantas de abastecimiento, contratos y marcas) a un competidor independiente. Sin embargo, dado que este es un proceso que puede tardar un tiempo, tendrá que transferir transitoriamente a un tercero independiente. Este tendrá que realizar la venta definitiva a un competidor independiente en un plazo no mayor a seis meses.

El objetivo de esta medida es que Terpel no pueda ejercer en ningún momento algún tipo de control en el negocio de lubricantes.

La venta será un negocio bastante atractivo para muchos jugadores, pues si bien Exxon Mobil tiene hoy alrededor del 15 por ciento de las EDS, estas representan cerca del 22 por ciento del volumen de ventas de combustibles del país.

Entre los posibles interesados en esta operación estarían jugadores que ya están en el país como Chevron-Texaco, Biomax y Petrobras. Sin embargo, se sabe que algunas de estas compañías también están pensando en salir de sus estaciones de servicio.

La multinacional Puma Energy que viene creciendo agresivamente en Colombia estaría interesada, al igual que otras compañías que aún no tienen presencia en el país, como Petróleos Delta (Panamá), Primax (Perú) y Enex (Chile).  También podrían llegar fondos de inversión, que si bien no son jugadores estratégicos les atraen estos niveles de inversión.

Vale recordar que el mercado de las estaciones en Colombia es en su mayoría de pequeños propietarios y que lo que se vende en realidad son los flujos de caja que generan estos “contratos de exclusividad” de suministro con cada marca.

 

Y el SI condicionado en Lubricantes

Por otra parte, la SIC autorizó a Terpel comprar el negocio de lubricantes de Exxon Mobil en Colombia, pero bajo algunas condiciones.

La primera es que efectivamente venda el negocio de distribución de combustibles, puesto que si no lo hace la Superintendencia podría ordenar “la reversión de la compra del negocio de lubricantes”.

La siguiente es que venda la planta de producción de lubricantes de Terpel en Bucaramanga y las marcas Máxter y Máxter Progresa, antes de 6 meses.

La compañía solo podrá conservar la planta de lubricantes que tiene hoy Exxon Mobil en Cartagena y la marca Mobil.

Además, le impuso la obligación de levantar las exclusividades en la distribución y exhibición de lubricantes que haya pactado con sus estaciones aliadas, así como no poder pactar dichas exclusividades dentro de los siguientes 10 años

Con esta decisión, la Superindustria busca preservar la competencia tanto en la cadena de valor de distribución de combustibles líquidos, como en los distintos mercados de lubricantes.

Exxon Mobil se reservó el derecho de seguir atendiendo a sus clientes directos de lubricantes en Colombia (principalmente multinacionales), por los próximos veinte (20) años. Además, seguirá participando en Colombia en el segmento “upstream” de la cadena de valor de combustibles (exploración de hidrocarburos).

Relevo en colpatria

Santiago Perdomo dejará la presidencia del Banco Colpatria (del Grupo Scotiabank) después de una carrera de más de 30 años en la entidad. El banquero seguirá vinculado como consejero delegado en Mercantil Colpatria. Perdomo comenzó a trabajar en el banco en 1981 como subgerente y tras una serie de promociones y éxitos, llegó a la presidencia en 1994. “Santiago ha realizado contribuciones muy significativas  a lo largo de estos años, y se convirtió  en uno de los líderes más respetados del sector financiero tanto en Colombia como en la región andina”, afirmó Eduardo Pacheco, presidente del Grupo Mercantil Colpatria y miembro de la junta directiva de Scotiabank.   Ante la renuncia de Perdomo, Jaime Alberto Upegui Cuartas asumirá el cargo

A otro nivel

El 17 de noviembre entró al servicio de los usuarios un nuevo tramo de la autopista Bogotá-Villavicencio. Tiene 4 túneles equipados con la más alta tecnología en materia de gestión de tráfico, a cargo de la firma Indra, una de las principales empresas globales de consultoría y tecnología. Su plataforma Horus permite reducir los riesgos de accidentes y ofrece una mayor calidad de servicio a los conductores. Esta solución ya controla el túnel del Renacer, el cuarto más largo de América Latina, inaugurado en 2016, y otros 10 adicionales estrenados en 2015 entre Puente Quetame-Naranjal, lo que supone que la plataforma de Indra ya gestiona 15 túneles de esta gran autopista. La Concesionaria Vial de los Andes, Coviandes (filial de Corficolombiana y del Grupo Aval), destacó esta tecnología de vanguardia.