El famoso busto de la reina egipcia Nefertiti.

CULTURA

Nefertiti reina en Berlín

Cien años después del hallazgo del busto de Nefertiti, el Museo Egipcio y la Colección de Papiros recuerda a esta reina con una gran exposición.

8 de diciembre de 2012

Nefertiti, la mujer del faraón Akenatón, la esposa principal del padre de Tutankamón, pasó más de 3.000 años de bruces, durmiendo bajo las arenas del desierto egipcio de Amarna hasta que el obrero Mohamed Ahmed es-Senussi se topó con su nuca y parte de la corona.
 
“Al desenterrarlo vimos surgir el más vivo de los objetos egipcios", escribió el egiptólogo alemán Ludwig Borchardt Borchardt en su diario de campo el 6 de diciembre de 1912.
 
Borchardt se dio cuenta inmediatamente de que se trataba de la reina egipcia de belleza legendaria pero no se lo dijo a nadie o por lo menos no se lo informó a las autoridades arqueológicas que decidían cuáles piezas se quedaban en Egipto y cuáles podían llevarse los extranjeros.

Así, Nefertiti fue a parar a Alemania y solamente fue exhibida muchos años después en el Museo Neus de Berlín, en 1924.

Desde entonces, los egipcios han exigido que la reina del Nilo vuelva a su país de origen.
 
Incluso, en 1933, Hermann Göring estuvo a punto de devolver el busto al Rey de Egipto como un gesto político, pero Hitler se negó. Declaró a Nefertiti como su ícono. “Jamás renunciaré al busto de la reina”, dijo el dictador.

Actualmente, el busto todavía se encuentra en el Museo Neues en Berlín y de hecho, su descubrimiento se conmemora con una gran muestra.

La exposición, que podrá verse del 7 de diciembre al 13 de abril del 2013, presenta alrededor de 1.300 objetos, entre piezas nunca antes expuestas de los fondos del museo y numerosos préstamos del Museo Metropolitano de Arte de Nueva York, el Louvre de París, el Museo Británico y el Museo Petrie de Arqueología Egipcia de Londres.

La muestra, que abarca una superficie de unos 820 metros cuadrados, abre con la genealogía de la familia real a lo largo de cuatro generaciones y los primeros años de reinado del faraón Akenatón, esposo de Nefertiti, capítulo que cierra con el abandono de la antigua capital.

"Esta exposición no es una muestra exclusivamente de Nefertiti, se trata de representar la época en la que vivió", entorno a 1346 a.C., subrayó la directora del Museo Egipcio de Berlín, Friederike Seyfried, en la presentación de la misma, al tiempo que señaló que para ello el busto se presenta en el contexto de su hallazgo.

También dedica un amplio apartado sobre las circunstancias y el contexto del hallazgo del busto de Nefertiti. Aborda también las primeras exposiciones sobre los objetos hallados en las excavaciones del valle de Amarna, así como las posteriores negociaciones ante la solicitud de devolución del busto por parte egipcia.

Mientras tanto, el debate sobre a dónde pertenece Nefertiti, cuyo nombre significa “la más hermosa ha llegado”, continúa.

Zahi Hawass, secretario general del Concilio Supremo de Antigüedades Egipcias, cree que el busto pertenece a Egipto y que fue sacado de ese país ilegalmente, y por tanto, debería ser devuelto.

Sin embargo, Hermann Parzinger, presidente de la Fundación de Patrimonio Cultural de Prusia, sostiene: "Nefertiti es la mejor embajadora de Egipto en Berlín”.

Con información de EFE