Dany de la Rosa Ledesma y Carla Cordoncillo Acosta son dos extranjeros que eligieron a Colombia como destino para estudiar.

ESPECIAL EDUCACIÓN

Colombia, un destino para estudiar

De México, España, Venezuela y otros países llegan jóvenes a prepararse en universidades colombianas. ¿Qué los atrae?

30 de septiembre de 2014

Aunque no había contemplado estudiar en América Latina, Carla Cordoncillo Acosta llegó a Colombia en enero para cursar la maestría en Estudios Interdisciplinarios sobre Desarrollo de la Universidad de los Andes. Llegó con su novio, Dany de la Rosa Ledesma, de República Dominicana. Él estudia arte dramático en el Teatro Libre de la Universidad Central.

Carla, española, estudió Ciencias Políticas en Barcelona y quería hacer una maestría relacionada con el desarrollo, pero no en Estados Unidos ni en Europa. Dany cursó arte dramático en su país, donde no vio crecimiento profesional. Entonces, los jóvenes identificaron opciones para sus propósitos y América Latina les pareció la mejor.

Buscaron en Argentina, Chile, México y Colombia. Hoy viven en la Residencial 10 (R-10), en el barrio de La Candelaria. Una suerte de mini Onu porque allí conviven con personas de Alemania, Francia, Holanda, Australia, Inglaterra, Chile, Perú y México, todos estudiantes universitarios.

“Muchos de los que vienen lo hacen porque un amigo hizo un intercambio y les dice, es increíble, lo mejor que he hecho”, dice Alejando Rueda, quien administra R-10 con Juan Pescador. Además de alojamiento, ellos ofrecen a los extranjeros la oportunidad de conocer la ciudad, para lo cual organizan eventos y visitas guiadas. Dicen que el cambio de imagen del país, así como los programas del gobierno, les ha ayudado a tener su casa llena.

Según la Cancillería, entre 2007 y 2014 un total de 64.328 extranjeros han llegado al país a estudiar. La mayoría son de Venezuela (16.907) y México (6.082). 

En gran parte, el aumento de estudiantes de otros países se debe a que la Cancillería y las mismas universidades están promoviendo intercambios para que los universitarios colombianos también puedan viajar. La Cancillería tiene, por ejemplo, el programa de becas ‘Plataforma de movilidad estudiantil y académica de la Alianza del Pacífico’, creado por los gobiernos de los países que conforman ese grupo: Chile, Colombia, México y Perú.

“Anualmente cada país entrega 100 becas. De ellas 25 son para estudiantes de doctorado, profesores o investigadores que por algún motivo su investigación los obliga a ir a uno de estos países”, explica Luis Soto, director de Asuntos Culturales de la Cancillería. Las otras 75 son para estudiantes de pregrado por un semestre. 

Soto dice que recibir extranjeros en Colombia ayuda a “enriquecerse con otras mentalidades, formas de ver el mundo y tecnologías. Además favorece el debate académico y la producción investigativa”.
Algo similar ven los extranjeros, quienes encuentran en el país el contexto para fortalecer su formación. Eso les pasa a Carla y Dany. “Bogotá es una ciudad diversa y eso nos ha sorprendido. Entender por qué se dan esos contrastes y de dónde vienen es muy interesante. Es una manera de complementar lo que se ve en clase”, dice Carla.

Por su parte, Dany explica que su experiencia “es como tener una referencia para el trabajo. Quisiera dedicarme a recoger la cultura de la negritud y llevarla a la escena actoral y musical”. 

Brasil y México

La Asociación Colombiana de Universidades (Ascún) firmó en 2012 un convenio para lograr el programa Movilidad Académica Colombia- Argentina (Maca). Hoy uno similar opera con Brasil: 28 universidades colombianas y 35 del Brasil han fijado 94 cupos por país en movilidad de pregrado. El mismo modelo se implementará con México.