Especiales Semana

Ellas preguntan

El humor nacional, la justicia y los recursos naturales del país fueron algunos de los temas por los que se cuestionaron las colombianas.

16 de marzo de 2013

71) ¿Por qué pensamos que una persona ‘viva’ es aquella que se aprovecha de otras y una ‘tonta’ es la que tiene principios? 

En el diccionario de colombianismos existen unas acepciones que se pueden agrupar en el vivo, el ‘avivato’ y el ‘avispado’, que se usan para denominar a una persona que no solamente tiene gran una capacidad e imaginación para actuar, sino que está caminando siempre al borde de lo ético. Ser vivo y ser avispado es un valor en sí mismo. En toda organización debe haber una persona con iniciativa, pero cuando esa viveza se usa para sacar ventaja en los negocios frente al otro y para aprovecharse de su  ingenuidad para hacer el atajo, como dice Antanas Mockus, entonces es difícil construir sociedad alrededor de una persona que está en el límite de lo moral. Lo preocupante es que esta sociedad ha entronizado al vivo como un valor, lo que se resume en la espantosa frase según la cual “el vivo vive del bobo”. Yo creo que si pensamos construir una sociedad respetuosa de la norma es imperativo cambiar de mentalidad y de comportamientos. El avispado hace negocios pero no hace empresa, el ‘avivato’ no necesita estudiar porque se las sabe todas, se las gana de ojo. Tenemos que construir una sociedad desde el conocimiento y el esfuerzo, pues solo así se obtienen resultados en el largo plazo, y una sociedad donde el principio de la buena fe vuelva a ser la línea rectora del comportamiento social.

Juan Luís Mejía Arango, rector de la Universidad Eafit.

72) ¿Por qué entregamos tan frescamente sus recursos naturales? 


Por clasismo, racismo e ignorancia. Clasismo, porque persiste –y gobierna– un modelo cultural colonial que aún tiene por ideal el mundo europeo y que se considera con derecho a decidir e imponerse sobre la naturaleza ecuatorial. Racismo, en el sentido más amplio de la palabra, por considerar que existe una sola forma correcta de hacer las cosas, y que se resiste a la diversidad como condición propia de la evolución y el progreso social. E ignorancia, porque las dos anteriores impiden construir un conocimiento propio, territorialmente adecuado, con sus derivaciones de innovación tecnológica y cultural ,con una identidad orgullosa de los múltiples modos de vida que podríamos tejer en el país si pensáramos y actuáramos con esa independencia que no hemos logrado. Estas tres tristes trabas se manifiestan juntas en un gigantesco aparato retórico y legal que permite perpetuar el despojo.

Brigitte Baptiste, bióloga, MA, directora general del Instituto de Investigación en Recursos Biológicos Alexander von Humboldt (IAVH).

73) ¿Por qué la justicia siempre es para los de ruana?

Quienes viven en estratos altos sienten que sus motivaciones a la hora de actuar son tan nobles, que de su parte prácticamente justifican cualquier acción y nunca son sancionados. Los primeros en cambio desean que a los sectores populares (los de ruana) sí les caiga todo el peso de la ley, aunque sea por causas de menor importancia. Es discriminar a la hora de aplicar sanciones legales.

Antanas Mockus, filósofo y matemático. Exalcalde de Bogotá. 

74) ¿Por qué a los colombianos se les ocurre un chiste para cualquier ocasión?

Cuando la realidad de un país te enferma no queda más remedio que la risa. El humor es el santo remedio para nuestros males. Contra los bacilos, el vacilón; para los pelos de punta, la tomadura de pelo; contra lo que ocurre, las ocurrencias. La salud es un chiste en Colombia y el chiste es la salud de los colombianos. El humor es una crítica, una reflexión. La única forma de asumir este país, no con el sinsabor de la resignación, sino con el de la revancha. Es el dulce sabor del chiste. Es un ajuste de cuentos. ‘Hacer el humor, no la guerra’, es nuestro tratado de paz interior. Cuando la vida te jode, hay que joder la vida. Si teníamos que darle un sentido a la vida, le dimos el sentido del humor. Porque si aquí pudiéramos elegir una forma de morir, sería la de morirnos de risa.

Karl Troller,  periodista y humorista.

75) ¿Por qué al colombiano le incomoda ver la realidad del país reflejada en el cine y la televisión?

El colombiano maneja dos discursos, uno público en el que contesta lo que cree que debería contestar; y uno privado en el que realmente hace lo que le gusta. Eso se evidencia sobre todo con las telenovelas. Se supone que no es bien visto decir “a mí me gusta ver novelas’’ y sin embargo, en las noches todo el mundo está frente al televisor mirando a ver qué pasó con la serie o la telenovela del momento. Entonces, no sabemos si realmente a la gente le incomoda ver la realidad del país en las pantallas del cine y la televisión, pues la gente maneja ese doble discurso.

Dago García, libretista.

76) ¿Por qué no nos sentimos orgullosos de nuestras raíces indígenas?


Es por nuestra historia. En la Conquista los españoles derrotaron a los indígenas a quienes consideraban inferiores porque no estaban preparados para entender su forma de vida. Juzgaban la cultura y la organización social de los pueblos indígenas con base en sus propios parámetros. Y como el vencedor cuenta la historia, en nuestra psiquis quedó que lo europeo era lo vencedor, lo deseable, y lo indígena algo inferior, atrasado, un lastre. Todavía queremos emular al blanco, a lo que viene del Viejo Continente, de ahí el desprecio hacia los indígenas. Nos falta dignidad propia para sentirnos orgullosos de nuestra mezcla y mestizaje. 

Daniel Aguirre, profesor de la Universidad de los Andes, director del Centro Colombiano de Estudios de Lenguas Aborígenes (Ccela).

77) ¿Por qué en Colombia la mayoría de la gente tiene celular, pero casi nadie tiene minutos?

Colombia tiene 102 celulares por cada 100 habitantes. Eso indica que hay más líneas telefónicas que personas porque el celular se ha convertido en un elemento casi esencial. En los años noventa, cuando los móviles entraron a Colombia eran objetos de lujo; hoy compiten con la canasta familiar. En aquellos hogares donde aún la bolsa de leche le gana al celular también existe la necesidad de usarlo. La cultura de las líneas prepagadas aún es muy fuerte y ha estimulado el negocio informal de los teléfonos atados a cadenas, que ha convertido a vendedores de chicles en virtuales nuevas cabinas telefónicas. Adicionalmente, el tiempo al aire es una nueva moneda y como toda moneda, es codiciada pero escasa en los más jóvenes.

Víctor Solano,  periodista.

78) ¿Por qué un doctor en Colombia no gana más de 5 millones de pesos?

En muchas sociedades, las personas que se dedican a oficios manuales tienen un mejor ingreso que los doctorados. En Estados Unidos, por ejemplo, a veces hay doctores que se dedican a la plomería porque esta última es mejor remunerada. Pero eso es excepcional, pues en las sociedades desarrolladas se valora más el conocimiento calificado. En Colombia se paga menos de lo que se debería a las personas con doctorado quizás por dos razones principales. Por un lado, no se valoran los estudios académicos en su justa medida (aunque esto no es general, los estudios en medicina se remuneran mejor que en otras disciplinas). Pero además, hay una paradoja: se necesita mucha gente preparada y muchos doctores, pero por la composición social de nuestro país, con un mercado tan estrecho en materia de educación, puede haber una sobreoferta. Es decir, puede que haya muchas personas con título de doctorado, pero pocos puestos disponibles para ellos.

Álvaro Tirado Mejía, historiador. 

79) ¿Por qué no tenemos buenas carreteras si nuestros peajes están entre los más caros del mundo?


Por las condiciones topográficas de nuestro país y por contar con un relieve muy particular, mantener y operar esas carreteras es más oneroso que en otras zonas del mundo. Si se analizan las cifras, aproximadamente 17.000 kilómetros componen la red vial nacional. De esos, unos 6.000 kilómetros están entregados en concesión, de los cuales el 80 por ciento está en buen estado. Pero de los 11.000 kilómetros que tiene el Estado, solo el 40 por ciento está bien. El caso de las deficiencias en los tramos concesionados está solucionado, pero indiscutiblemente hay una insuficiencia de recursos para atender el porcentaje que administra el Estado. No solo a punta de peajes se puede obtener el dinero. La solución para ese problema es combinar el producto de los peajes con recursos de la Nación, sin embargo, estamos hablando de billones de pesos. 

Jorge Alberto Marín, director técnico de la Cámara Colombiana de la Infraestructura.

80) ¿Por qué se dice que en política nadie está muerto? 

Porque en política, después de un fracaso o de un desprestigio, siempre es posible recuperar las características con que se consiguen los votos. Los cuestionamientos éticos o legales a un político, o haber perdido elecciones previas, no son motivos suficientes para morir en esa actividad. En Colombia y en los países con una cultura política similar, las clientelas heredadas, las repartijas burocráticas, los apellidos, el carisma, la manzanilla y la convivencia diaria con las tragedias del poder son condiciones para que cualquiera pueda salvarse de la muerte política. 

Lariza Pizano, politóloga y periodista. 

81) ¿Por qué usamos la expresión lobo? 


En todos los sistemas coloniales se crearon complejos escalafones étnicos por castas y tonos de piel, a modo de instrumentos de control social. En la Nueva Granada se estableció que al combinar español con negra salía mulato, mulato con española cuarterón, negro con india chino, indio con mulata calpamulata, y así hasta obtener 16 categorías entre las que se cuentan términos tan curiosos como zambo, albarazada, tentenelaire, cambujo y notentiendo.   El hijo de india pura con criollo (mestizo de español e indio) se denominó lobo (coyote en México). Esa mezcla se daba sobre todo entre clases subordinadas, es decir, entre patrones y sirvientes. Tener hijos con las clases superiores era una forma de lograr movilidad social. El lobo, hijo bastardo del patrón criollo, podría eventualmente heredar y lavar su origen social. Las demás clasificaciones se han perdido. Pero el concepto de lobo se incorporó al lenguaje cotidiano actual y adquirió nuevos significados. En sociedades arribistas y altamente estratificadas como estas, el calificativo ‘lobo’ se usa para estigmatizar sin piedad al escalador social que se desprecia, muchas veces sin que él mismo se dé cuenta, porque se cree mimetizado por su vestido, hábitos y maneras. Sin embargo, como un Tántalo social, nunca alcanzará su objetivo y siempre será estridente, porque las clases altas cambian constantemente los referentes de sus costumbres.

Carlos Mauricio Vega, escritor y periodista.