Especiales Semana

VIDA Y SALUD

18 de noviembre de 1991

UN TOQUE DE ETERNIDAD
SIRENAS, ANCLAS, BARCOS y corazones fueron los motivos de inspiración para que personajes de la historia tuvieran una imagen propia impresa en los brazos, pecho y cualquier otra parte del cuerpo que fuera digna de exaltación. Antiguamente, para lograr estas obras de arte en piel, se utilizaban un palo de bambu, una hebra de hilo y una aguja. Estos tres elementos permitían el paso de tintas hechas a base de hollín, carbón vegetal pulverizado y añil, para darles a las figuras un color natural y propio que reflejara fielmente el modelo inicial.
Esta milenaria arma que nació de culturas salvajes, hoy entra por la puerta grande de la industria cosmética para ser utilizada por las mujeres ejecutivas del siglo XX. Porque en la década del 90, el tatuaje entra en los escenarios cosméticos como una solución para el embellecimiento del rostro y el mejor agente contra los años.
Alternativa bien recibida por mujeres de todas las profesiones existentes, desde amas de casa, actrices y bailarinas hasta altas ejecutivas que por las múltiples actividades que realizan, no pueden dedicar mucho tiempo a la belleza.
Cirujanos plásticos y cosmetólogos especialistas en la técnica del tatuaje, ofrecen un delineado de ojos y cejas permanente con base en pequeños puntos de tinta para que los lápices delineadores desaparezcan por completo del kit de maquillaje tanto como los rostros pálidos y sin vida.
Con este nuevo sistema de maquillaje, sólo basta con mirarse al espejo y tomar la decisión de ir a un centro de belleza para ver realizados los sueños prácticos que permite la tecnología del siglo XX.
Muestra de ello, son los famosos cantantes norteamericanos Michael Jackson y Prince, que después de cuatro horas de violentos movimientos en concierto, su maquillaje continua intacto.
Sin embargo, esta maravilla también tiene su lado flaco y se mide en términos de distancia. De lejos es perfecto, pero a la hora de un close-up, no se puede evitar el asombro al ver miles de puntos negros haciendo fila en las orillas de los párpados.

CUESTION DE ESTETICA
Este progreso en el campo estético llegó a Colombia en 1986 y desde ese momento los resultados fueron más allá de lo que se esperaba. Por eso, la industria de cosméticos amplió sus horizontes y hoy en día existen aproximadamente 20 centros de belleza especializados en esta labor.
La posibilidad de lucir un buen maquillaje las 24 horas del día sin necesidad de retoque, se convirtió en la salvación de miles de mujeres colombianas que necesitaban conservar una buena imagen sin tantas complicaciones.
Sin embargo, con el paso del tiempo, la industria de maquillaje permanente presentó varios inconvenientes.
A pesar de que los aparatos electrónicos tenían un gran respaldo tecnológico y que las tintas que se utilizaban no contenían químicos ni producian ningún efecto secundario, el miedo al contagio de cualquier enfermedad se convirtió en el motivo para que las puertas de los consultorios no se abrieran con tanta frecuencia.
El problema se solucionó con charlas de orientación para los usuarios y explicación clara y concisa de los métodos, asegurando el profesionalismo e higiene de quienes realizan el trabajo.
Posteriormente, el problema ya no era el miedo físico sino sicológico. El hecho de mirarse al espejo y ver siempre la misma expresión de la cara, hacía que las mujeres sufrieran un colapso nervioso todas las mañanas. La idea de la palabra permanente se convirtió en un suplicio y no en una ventaja. En casos extremos, el riesgo ha llevado a la pérdida casi total de las pestañas días después del proceso de maquillaje permanente. Según algunos especialistas la causa es el trabajo de punción para introducir las tintas, que mata los folículos que permiten el nacimiento de las mismas.
La técnica de maquillaje permanente ha sido fuertemente criticada por los amantes de la naturaleza pero a su vez muy elogiada por aquellas mujeres que han encontrado en un delicado de ojos o de cejas la solución para la mejor distribución del tiempo.
Este nuevo método de maquillaje según los especialistas, no tiene grandes riesgos. Y aseguran que éste es confiable si se hace con el profesionalismo que se requiere.