El Programa de Calidad Sostenible AAA Nespresso en Colombia ha impactado a más 36.500 fincas en Caldas, Antioquia, Nariño, Cauca, Santander, Cundinamarca y, más recientemente, en Caquetá.
El Programa de Calidad Sostenible AAA Nespresso en Colombia ha impactado a más 36.500 fincas en Caldas, Antioquia, Nariño, Cauca, Santander, Cundinamarca y, más recientemente, en Caquetá. | Foto: Nespresso

Café

Los programas para mejorar la calidad del café colombiano

Mediante la implementación de programas integrales e innovadores, el país se afianza como referente de calidad, productividad y sostenibilidad del sector.

23 de octubre de 2021

Ser el mayor productor mundial de café arábica le aporta a Colombia grandes beneficios, aunque también desafíos, pues más allá de ser uno de los productos insignia del país y referente en el ámbito global, se constituye en un tejido social, cultural y económico que impacta de diversas maneras a las comunidades productoras, a consumidores, al medioambiente y a la economía, lo que exige un compromiso con su desarrollo sostenible.

“El café colombiano es apreciado a nivel global por su alta calidad, sus características organolépticas y la diversidad geográfica de sus tierras, de ahí que para nosotros apoyar su producción sostenible es prioridad, ya que ayuda a mejorar la calidad, la cantidad y las condiciones de los caficultores”, señala Daniele Buzzetti, general manager de Nespresso.

Un café AAA

Así, ofrece formación y asistencia técnica con profesionales agrónomos, primas económicas por encima de los precios del mercado y vinculación a proyectos de alto impacto como la agroforestería o siembra de árboles nativos que mejoran las condiciones del suelo, lo que repercute en la calidad de café, al tiempo que ayudan a reducir la huella de carbono; estos proyectos de agricultura regenerativa y la mejora de acueductos veredales se hacen con apoyo de la Federación Nacional de Cafeteros por medio del comité de cafeteros y USAID.

Los aportes del programa en Caquetá se reflejan también en una mejora en la infraestructura con secadores solares, maquinaria para despulpar y, según apunta Buzzetti, en permitir que por primera vez se exporte café de esta región al mundo, así como en desarrollos de cafés especiales como Reviving Origins Esperanza de Colombia, un café suave, ligero en acidez, frutal y con ligeras notas a cereal cultivado en esta región.

El camino recorrido permite vislumbrar un mejor futuro para Colombia, para caficultores y caficultoras, y para el mundo, que podrá disfrutar de los aromas, sabores y calidad únicos de un café sostenible cultivado con conciencia y dedicación.