La Expo tuvo unos números muy bajos en sus primeros días y tocó fondo el 5 de mayo con tan sólo 85.564 visitantes, que los participantes atribuyeron a una decisión de los organizadores de limitar la entrada para ajustar el funcionamiento del recinto y la seguridad.

Asistencia a la Expo de Shanghái fue inferior a lo previsto

La Exposición Universal de Shanghái recibió más de ocho millones de visitantes durante su primer mes, por debajo de la media mensual necesaria para alcanzar el objetivo de sus organizadores de 70 millones de visitantes en sus seis meses de duración.

2 de junio de 2010

En los últimos días de mayo, la Expo de Shanghái tuvo cerca de 380.000 visitantes diarios, e incluso superó los 500.000 el pasado sábado, aunque durante mayo no alcanzó los más de 11,5 millones mensuales necesarios para lograr el objetivo de sus organizadores.

Varios pabellones han recibido ya un millón de visitantes, entre ellos los de Francia, España, Australia, Estados Unidos, Turquía, Canadá e Indonesia.

España anunció que llegó al millón de visitantes el pasado sábado, después de una primera semana en la que recibió unos 22.000 visitantes diarios, que fueron aumentando según creció el público de la propia Expo, hasta lograr una media de 38.918 visitantes la semana pasada, según sus responsables.

El pabellón chino, por su parte, tiene limitado el número de visitantes a unos 30.000 diarios para evitar colas gigantescas y problemas de seguridad, por lo que es necesario reservar con antelación las entradas, que se agotan a diario en los cinco primeros minutos de la jornada.

La Expo tuvo unos números muy bajos en sus primeros días y tocó fondo el 5 de mayo con tan sólo 85.564 visitantes, que los participantes atribuyeron a una decisión de los organizadores de limitar la entrada para ajustar el funcionamiento del recinto y la seguridad.

Sin embargo, ahora la Expo ya funciona a pleno rendimiento, con colas de hasta cuatro horas en el pabellón ruso o tres en el alemán.

La peor parte se la ha llevado este primer mes la Zona de Mejores Prácticas Urbanas (ZMPU), donde están situados los pabellones de las ciudades, la gran novedad de este evento, casi desierta durante semanas porque los visitantes no cruzaban el río que atraviesa el recinto para verla.

Los participantes pidieron a la Expo medidas para atraer público y ahora los visitantes pueden conseguir una entrada para el pabellón de China o el de Arabia Saudí, los más difíciles de ver, si presentan 16 sellos de pabellones de la ZMPU en su pasaporte de recuerdo de la Expo.

Para ayudar a las tres ciudades españolas participantes, Madrid, Bilbao y Barcelona, el pabellón de España permite ahora la entrada sin esperar la cola a aquellos que presenten el pasaporte con esos tres sellos.

Otros problemas tampoco han faltado en el primer mes, con quejas de muchos participantes por mala organización y logística, por ejemplo, en el reparto de entradas para los espectáculos organizados en los auditorios del recinto, donde actuaron, entre otros, el Ballet Nacional de España y la Joven Orquesta de la Unión Europea.

La Expo anunció hoy cambios en la forma de obtener esas entradas, ya que, a partir de ahora, los visitantes las podrán recoger en una taquilla de los auditorios, en lugar de ser repartidas de forma aleatoria por los voluntarios, como hasta ahora, lo que hizo que algunos espectáculos se quedaran casi vacíos.

 

 

EFE