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MUNDIAL RUSIA 2018

El histórico momento en el que el VAR se utilizó por primera vez en un Mundial

Al minuto 58 del juego que enfrentó a Francia y Australia, Antoine Griezmann cayó en el área rival y el juez no pitó nada. Poco después este apeló al video, cambió su decisión y dejó una postal para siempre.

16 de junio de 2018

Esta edición de la Copa del Mundo pasará a la historia por ser la primera en que se implementó la herramienta del vídeoarbitraje (VAR), una medida que procura disminuir el margen de error en las determinaciones arbitrales. Hacer más justo el deporte.

Sucedió este sábado, en el primer partido del grupo C entre las selecciones de Francia y Australia. El VAR hizo su debut para darle claridad a una jugada que generó polémica. 

El desarrollo del partido había mostrado a un equipo australiano bien parado en zona defensiva y un conjunto francés sin mucha claridad en los últimos tres cuartos de cancha. Los galos parecían no encontrar la forma de destrabar el planteamiento táctico propuesto por los oceánicos.

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A la altura del minuto 58, Antoine Griezmann, figura y delantero de ‘Le Bleus‘, recibió la pelota en posición favorable y emprendió carrera hacia el arco del guardameta Matt Ryan. Cuando se disponía a impactar la pelota, en lo que fácilmente hubiera sido el primer tanto del encuentro, fue desestabilizado por Joshua Risdon, jugador australiano, y cayó dentro del área. 

Inicialmente parecía que Risdon no había cometido infracción, y se continuó jugando. Sin embargo, el juez uruguayo Andrés Cunha decidió detener las acciones y acudir al VAR para apreciar desde otro ángulo lo que había sucedido.

Verificó y notó que efectivamente Risdo impactó el pie del francés, y le impidió el remate a la portería de Ryan. Por esto decretó pena máxima.

El encargado de cobrar fue el mismo Griezmann, que con frialdad anotó el primer gol del partido.

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A los pocos minutos, los australianos lograron el empate también desde los once pasos y, cuando ya parecía que los 90 minutos terminarían en una igualdad, Paul Pogba surgió entre los defensas australianos y tras una serie de rebotes marcó la diferencia definitiva.

Acabaría así con una ventaja de 2 a 1 a favor de una Francia que no convenció, pero vio como el uso de la tecnología le ayudó a cosechar sus primeros tres puntos en el torneo.