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| Foto: Agencia DW

ITALIA

Negociaciones en Italia para formar un gobierno antisistema

Después de dos meses de bloqueo político, el Movimiento Cinco Estrellas y el partido Liga Norte anunciaron posibles negociaciones para formar gobierno y no tener que recurrir nuevamente a unas votaciones.

11 de mayo de 2018

La formación antisistema Movimiento Cinco Estrellas y el partido ultraderechista Liga comenzaron el jueves a negociar cuestiones de fondo para la formación de un gobierno en Italia, tras la retirada la víspera del principal obstáculo a su alianza: Silvio Berlusconi.

Los jefes de filas de ambas formaciones, que suman una estrecha mayoría en el parlamento, Luigi Di Maio (M5S) y Matteo Salvini (Ligue), se reunieron por la mañana en Roma.

"Nos sentaremos a la mesa y empezaremos a hablar de los temas del país. Después, hablaremos de nombres. Lo importante es el contrato de gobierno", afirmó Di Maio, de 31 años, el miércoles por la noche, advirtiendo de que la negociación podría llevar tiempo.

"Queda trabajar en el programa, en los plazos, el equipo y las cosas que hay que hacer", reconoció Salvini, de 45 años. Pero "o concluimos rápidamente, o volvemos a votar", presionó.

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Según la prensa italiana, el presidente Sergio Mattarella, que el miércoles quería nombrar a un jefe de gobierno "neutro" tras dos meses de bloqueo, está dispuesto a dejar "unos días" a los dos políticos para que se pongan de acuerdo.

Desde las elecciones del 4 de marzo, tanto Di Maio como Salvini reivindican el puesto de jefe del gobierno. El primero en tanto que líder del partido más votado (más de 32%), el segundo como jefe de la coalición conservadora que llegó en cabeza (37% en total, de los cuales 17% para la Liga).

Ambos dicen estar dispuestos a dar un paso al lado para elegir juntos a otra personalidad pero, según la prensa, ninguno de los dos renunció al cargo completamente. 

Se abrió el cerrojo 

Ambiciones a parte, ambos partidos tienen en común un rechazo de las fuerzas políticas tradicionales y promesas similares en materia de jubilación, lucha contra la inmigración o moralización de la vida política.

El miércoles por la noche saltó el último obstáculo a su unión: Silvio Berlusconi, el aliado al que Salvini no quería abandonar pero con quien Di Maio se negaba a hablar, dio luz verde a un acuerdo.

En un comunicado, el multimillonario ex primer ministro, de 81 años, que dirigió la derecha italiana durante un cuarto de siglo, reiteró que los diputados de su partido, Forza Italia (FI), no votarían por un gobierno del M5S.

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Pero "si otra fuerza política de la coalición de derechas quiere asumir la responsabilidad de formar un gobierno con 5 Estrellas, tomaremos nota de esta decisión con respeto", aseguró.

Y sobre todo, agregó que esto no rompería la alianza entre FI y la Liga, en particular en las regiones donde gobiernan juntos en el norte de Italia, un punto esencial para Salvini.

En el parlamento, Liga y M5S disponen de una mayoría de 6 votos en el Senado y de 32 en la Cámara de Diputados, y podrían tener puntualmente el apoyo activo o la abstención de FI.

La perspectiva de tal acuerdo no enloqueció a los inversores en la Bolsa de Milán, que estaba casi en equilibrio el jueves por la mañana. Sin embargo, en el mercado de deuda, la tasa a diez años subió a 1,93% frente a 1,88% la víspera, el peor resultado de la Eurozona.