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PASO RASPANDO

El Primer Ministro socialista de Grecia pierde terreno en las elecciones, pero conserva el poder y una apretada mayoría.

8 de julio de 1985

"Estoy profundamente conmovido tras la más grande confrontación política que haya conocido la Grecia moderna entre las fuerzas del cambio y el progreso y las fuerzas de la sumisión y la reacción". Contundente, acostumbrado a pisar duro, a disparar cañonazos verbales, el primer ministro Andreas Papandreu saludó con esas palabras los resultados de las elecciones parlamentarias del domingo 2 de junio que le favorecieron a él y a su Movimiento Socialista Panhelénico (PASOK). Aunque no por un amplio margen (ver las cifras en el recuadro), lo logrado por Papandreu puede ser visto, en realidad, como una victoria sólida.
Su contendor, el Partido Derechista Nueva Democracia (ND) que acaudilla ahora Constantino Mitsotakis, estaba seguro de ganar. Durante la campaña, ellos trataron de canalizar un supuesto "descontento popular" con los cuarenta y tres meses de gobierno socialista, para recuperar el poder que perdieron en octubre de 1981.
No consiguieron lo uno ni lo otro pues el PASOK, que había pedido a los electores griegos cuatro años más para profundizar el Allagui (cambio) fue oído. Papandreu tendrá 161 escaños de los 300 que constituyen el Parlamento griego, mientras que Mitsotakis controlará 125.
Que estas elecciones fueron un referéndum sobre la primera experiencia de gobierno socialista en el país eso nadie lo duda, Stefanos Manos jefe de la campaña de Nueva Democracia, había incluso profetizado que esa sería la clave del triunfo. "Si la elección es un referéndum sobre la economía, ganaremos". Profetizó mal. Los indicadores que enorgullecen a Papandreu y que son ácremente cuestionados por Mitsotakis, por lo visto pesaron bastante a la hora de la verdad. El PASOK afirma que la inflación, que era del 24.5% en 1981, sólo fue de 18.5% el año pasado y que el índice de desempleo (de 7% al llegar ellos al poder) hoy sólo ha subido un punto, lo que hace de Grecia el país con el menor índice de la Comunidad Europea en ese rubro.
Para ND el desempleo es, en cambio, superior al 12% y la inflación es altísima en relación con los índices de la CEE. Pero Papandreu tenia otras cartas bajo la manga: las concesiones que le pudo arrancar a la CEE que le permiten subsidiar a los agricultores, y de otro lado, las medidas democratizantes implementadas, como la aprobación del matrimonio y divorcio civiles, el voto a los 18 años, la despenalización del adulterio, el retorno de los exiliados comunistas, las leyes contra la tortura, etc.
Papandreu se inició como político en 1939 siguiendo lineamientos trotskistas no muy firmes y luchó contra el régimen de los coroneles -como también hizo Mitsotakis- instaurado en 1967, por lo que estuvo preso algún tiempo. En esa época creó un grupo de resistencia, el PAK que después vendría a ser el núcleo del PASOK, fundado cuando se restauró la democracia.
Mitsotakis, por su parte, es un hombre de enorme estatura física (1.92 metros) que se ha ganado el exagerado apodo de "El Frankestein de la derecha" por ese detalle y su cara de palo permanente (alguna vez durante la campaña le hizo caso a sus asesores norteamericanos y sonrió ante las cámaras de T.V.,el resultado fue nefasto). Tras la caída de los coroneles fundó un partido liberal que pronto fracasó por lo que Mitsotakis no vaciló en pasarse a Nueva Democracia que en 1978 gobernaba el país. Elegante, fogozo orador (aunque menos convincente que Papandreu) el derrotado caudillo de Nueva Democracia ha logrado en los últimos seis meses convertirse en el verdadero líder de la oposición.
El odio mutuo que se profesan Papandreu y Mitsotakis es popular en Grecia e hizo que la campaña electoral estuviera salpicada de ataques personales entre ellos aunque sin llegar a desencadenar incidentes serios entre sus partidarios. Ambos tienen 66 años e hicieron parte en 1964 y 1965 del gabinete de Georgios Papandreu, padre de Andreas y Ministro; recuerda esa época con indignación al referirse al papel que Mitsotakis jugó en ella. Cuando Papandreu padre entró en crisis con la monarquía griega, Mitsotakis no fue leal con el partido de gobierno sino que, por el contrario, se escindió de éste creando una crisis institucional que llevó al golpe de los coroneles. De allí el calificativo de "traidor" que constantemente le indigna Papandreu y las acusaciones de que el líder de ND mantiene "estrechos contactos" con el destronado rey Constantino, exiliado en Londres. Mitsotakis por supuesto responde que esto último es mentira, así como las acusaciones según las cuales él tiene relaciones con la extrema derecha.