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Adriana Mejía, en un comunicado enviado a los comités de Caldas y Risaralda que la postularon, les agradeció su apoyo y los invito a votar por Vélez Vallejo. | Foto: Fedecafe

GREMIO

Adriana Mejía declina de la aspiración a la gerencia de la Federación de Cafeteros

Directivos del Comité de Cafeteros de Caldas extendieron su apoyo a Roberto Vélez. La elección será este miércoles.

9 de agosto de 2015

Los directivos del Comité de Cafeteros de Caldas expresaron este sábado su apoyo a la decisión de Adriana Mejía Cuartas de renunciar a su aspiración a la gerencia general de la Federación Nacional de Cafeteros, en favor del risaraldense Roberto Vélez Vallejo.

Mejía, en un comunicado enviado a los comités de Caldas y Risaralda que la postularon, les agradeció su apoyo y los invitó a votar por Vélez Vallejo.

La elección del nuevo gerente se hará este miércoles en un Congreso Nacional Cafetero convocado de manera extraordinaria.

Aparte del actual embajador colombiano en Japón, también está en la carrera por el cargo el ex superintendente de Sociedades Luis Guillermo Vélez.

Ambos candidatos han señalado que la unidad gremial, la rentabilidad del negocio, una caficultura para el posconflicto y un mayor reconocimiento de los cafeteros desde la dirigencia central son los principales retos del sector para ser más competitivos.

En las propuestas planteadas a productores de 550 municipios de alta dependencia cafetera en 16 departamentos del país, los dos aspirantes insistieron también en un aumento de la producción de café a 20 millones de sacos en los próximos cinco años.

Para Roberto Vélez lo fundamental está en que se logre un puente entre el gobierno nacional y los productores, con el respeto de la independencia y la institucionalidad. Planteó además buscar nuevos nichos de consumo que le den una mayor rentabilidad al negocio cafetero y un equilibrio en los precios de los insumos.

Por su parte, Luis Guillermo Vélez cree que es necesario reconsiderar la forma como la dirigencia se relaciona con los comités municipales y departamentales, buscando además ampliar la frontera cafetera en las regiones más afectadas por el conflicto armado y que serán fundamentales en el posconflicto, entre otras Caquetá, Nariño, Santander y Putumayo.

Ambos se mostraron partidarios de prorrogar el contrato de operatividad del Fondo Nacional del café, con una revisión a la rentabilidad del negocio y reiteraron la importancia de las nuevas tecnologías en la caficultura colombiana.