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En el velero Lazy Duck fue donde ocurrió el crimen que ahora la autoridades holandesas epseran resolver. | Foto: Kailline Giraldo / El Universal

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Asesinato en Cartagena: Fiscalía holandesa dice que esposo es responsable de la muerte de turista

El caso del crimen de Durdana Bruijn, ocurrido en septiembre de 2015 en el velero Lazy Duck, está a punto de tener una sentencia.

1 de octubre de 2020

Desde el día de la sospechosa muerte de la ciudadana holandesa Durdana Bruijn, el 19 de septiembre de 2015, a bordo del velero Lazy Duck en la Bahía de Las Mantas, en cercanías a Islas del Rosario, las versiones entregadas por el esposo a muchos les sonaron “incompletas y confusas”.

El misterio sobre la verdad de los hechos parece estar a punto de saberse, luego del anuncio del Gobierno de los Países Bajos de que en los próximos días se conocerá el veredicto del caso.

Según las versiones entregadas ese día por Peter Putker, el esposo y único testigo, seis hombres armados y que vestían pasamontañas ingresaron a la nave mientras ellos estaban en altamar y, tras robarlos, asesinaron a Bruijn.

De ahí que los registros noticiosos del momento señalaran que el ataque había sido cometido por “piratas” que querían despojar de sus pertenencias a la pareja de extranjeros. Putker indicó, en ese momento, que su mujer había fallecido debido a los golpes recibidos por los asaltantes.

El general Carlos Rodríguez, comandante de la Policía Metropolitana de Cartagena en los días del crimen, ofreció una recompensa de hasta 30 millones de pesos a quienes entregaran información que permitiera la captura de los homicidas.

Pero, para sorpresa de todos, las pruebas forenses determinaron que la mujer murió por asfixia y que el hombre presentaba pequeñas lesiones en su cuerpo. Lo que le dio un rumbo diferente a la investigación y pusieron a Putker en la primera línea de sospechosos.

En mayo de 2016, Roderick Pútker, el hijo de la pareja, viajó a Cartagena en compañía de un grupo de periodistas holandeses con la intención de descubrir realmente quién había asesinado a su madre. En sus declaraciones a la prensa local, el joven aseguró que creía en la versión de su padre. Sin embargo, en noviembre de 2019 el Ministerio Público de los Países Bajos llamó a juicio a Putker.

La versión

En su reciente declaración, hecha en los tribunales holandeses de Utrech, Putker relató nuevamente que esa noche habían empezado la cena con un juego y unas bebidas, que un poco después de las seis de la tarde, mientras estaba en el baño, sintió unos gritos de su esposa. Y que luego dos hombres enmascarados lo habían golpeado, lo amenazaron y le dijeron que les entregara todos los elementos de valor, incluidas las computadoras.

Durdana Brujin y Peter Putker, días ntes del crimen de la mujer.
Durdana Brujin y Peter Putker, días antes del crimen de la mujer. | Foto: Archivo Particular

Según cuenta, le dijo que se podían llevar todo lo que quisieran y unos minutos después logró salir y halló a su mujer muerta, con una toalla alrededor de la cabeza, pero que no pudo dar aviso enseguida a las autoridades. Además, el hombre señaló que usó la palabra “piratas” en ese momento porque no halló otra conocida en su poco español.

La versión fue desvirtuada por el fiscal del caso, quien cree que Putker parece ser el único responsable debido a que no había más nadie abordo; las pesquisas realizadas en velero por investigadores colombianos y holandeses no hallaron rastros de una tercera persona (huellas dactilares o muestras de ADN); y los supuestos asaltantes no se robaron los equipos tecnológicos del barco, los teléfonos móviles de la pareja, ni el dinero en efectivo que tenían en sus bolsos, más de 10 millones de pesos en moneda extranjera.

Una de las grandes preguntas planteadas por los investigadores del caso es cómo lograron ingresar los ladrones, sin ser vistos por nadie, en medio de una zona turística y cercana a las playas de un reconocido hotel. Además, el fiscal ha planteado las dudas frente al hecho que el hombre haya sido dejado con vida y solo tuviese lesiones menores, luego de que Brujin fue asesinada.

Lo más grave, según los investigadores, es que en el barco fueron encontrados elementos que sugieren que Putker intentó borrar las evidencias y pruebas de la escena del crimen, entre estas toallas y ropa manchadas de sangre. Por eso, una de las versiones que ha tomado fuerza que es la pareja habría tenido una discusión y el hombre habría terminado estrangulando a su mujer.

Con todos esos datos, el fiscal del caso solicitó que Putker sea condenado a ochos años de prisión por el delito de homicidio involuntario. Con lo que, si se llegase a comprobar la culpabilidad del hombre, se confirmarían las sospechas iniciales de los guardacostas colombianos, quienes desde el primer momento afirmaron que “la información que entrega el extranjero era muy difusa” a pesar de que lanzó bengalas para avisar de la emergencia.