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	Los integrantes de la Coalición de la Esperanza, esta semana, durante la presentación de sus principios y propuestas.
Los integrantes de la Coalición de la Esperanza, durante la presentación de sus principios y propuestas. | Foto: CORTESIA COLIACIÓN DE LA ESPERANZA

Política

Cónclave: llegó la hora cero, y a puerta cerrada se reúnen Sergio Fajardo y Alejandro Gaviria con sus aliados

Busca acuerdos para candidato presidencial único, lista de candidatos al Congreso y plataforma programática. Íngrid Betancourt regresa a la arena política. Quieren ser el centro del espectro.

28 de noviembre de 2021

¿Para qué se reúne hoy el cónclave de La Esperanza?

Los principales líderes de todos los partidos y movimientos de la Coalición de la Esperanza se meterán desde las 8 y 30 de la mañana de hoy a deliberar a puerta cerrada en busca de tres propósitos: proclamar un acuerdo para ir unidos a una consulta interpartidista donde definirán el candidato presidencial de unidad, pactar listas únicas para el Congreso y echar las bases de un acuerdo programático.

La Esperanza es una concurrencia de fuerzas de centroizquierda, que busca ubicarse en el centro del espectro político en la contienda por la Presidencia de la República y la renovación del Congreso en 2022.

Estalla crisis entre Alejandro Gaviria, César Gaviria y el Partido Liberal
Estalla crisis entre Alejandro Gaviria, César Gaviria y el Partido Liberal | Foto: Estalla crisis entre Alejandro Gaviria, César Gaviria y el Partido Liberal

Uno de los postulados que comparte la mayoría de estos precandidatos es la implementación del acuerdo de paz suscrito con las Farc. Con seguridad formará parte de su propuesta política.

Su propósito es mantenerse tan distante de la izquierda radical de Gustavo Petro, como de la orilla que lidera el expresidente Álvaro Uribe.

Al encuentro concurrirán seis precandidatos presidenciales: Sergio Fajardo, Alejandro Gaviria, Juan Fernando Cristo, Jorge Enrique Robledo, Juan Manuel Galán y Carlos Amaya.

Hay muchos aspectos singulares de este encuentro, como que será el bautizo de Alejandro Gaviria como miembro de esa alianza, luego del rompimiento abrupto con el Partido Liberal y de su enfrentamiento con el expresidente César Gaviria.

Sergio Fajardo, quien para algunos es el ‘capo’ del bloque político, llega a esta cita en medio de una tempestad por los cargos fiscales que le formuló la Contraloría General de la República, a propósito de presuntas responsabilidades suyas en las billonarias pérdidas de Hidroituango, cuando fue alcalde de Medellín.

Juan Manuel Galán llega a este encuentro con partido propio, luego de que la Corte Constitucional le retornara la personería jurídica del Nuevo Liberalismo, organización política fundada por su padre, Luis Carlos Galán Sarmiento. La familia Galán, que se considera heredera del partido, se enfrenta a una cascada de reclamaciones de cofundadores de esa organización y de sectores que sienten que también tienen derecho a estar en el naciente proyecto.

Juan Fernando Cristo, como Galán, vienen de abandonar el Partido Liberal por diferencias con el jefe de esa colectividad, César Gaviria.

Cristo representa en esa coalición, en buena parte, a un sector que sigue orientaciones del expresidente Juan Manuel Santos.

Robledo, quien abandonó el Polo Democrático hace algunos meses, fundó un nuevo partido denominado Dignidad. Robledo representa a una izquierda más moderada que la de Gustavo Petro, de quien por cierto es uno de sus más duros contradictores.

El exgobernador de Boyacá, Carlos Amaya, viene de la Alianza Verde, partido que dejó a sus bases en plena libertad para votar por el candidato presidencial de sus preferencias.

Íngrid Betancur y Humberto de la Calle, harán las veces de coordinadores del encuentro de hoy, al parecer por no tener aspiraciones presidenciales.

De la Calle era visto hasta hace unas semanas como un firme aspirante a la Presidencia, pero recientemente divulgó un trino en el que confesó que le gustaría liderar la lista única de la coalición al Senado.

Otra novedad es el retorno directo de Íngrid Betancourt, a la política activa.

Betancourt se había marginado del proselitismo político luego de retornar de su secuestro a manos de las Farc, que la privó de la libertad por 6 años.

Íngrid tiene una amplia experiencia política, pues fue elegida senadora en 1998 con una de las votaciones más altas hasta entonces y después se postuló a la Presidencia, en cuyo ejercicio como candidata fue secuestrada en febrero de 2002.