Home

Nación

Artículo

FUE COMO UN SUEÑO

Juan Pablo Montoya concedió una entrevista para SEMANA minutos después de haberse <BR>coronado como nuevo campeón de la Cart.

6 de diciembre de 1999


UN TEMA TENIA MUY PREO- cupado a Juan Pablo Montoya el domingo pasado en el óvalo de Fontana,
California: la suerte de su amigo Greg Moore, quien chocó violentamente contra uno de los muros de pro-
tección de la pista. A lo largo de las tres horas de competencia Montoya le preguntó insistentemente a Chip
Ganassi sobre Moore. El hombre fuerte de Target guardó silencio. No podía contarle que había fallecido. Y en
algunas oportunidades le dijo a su piloto que la comunicación era muy mala y no le entendía nada. El nuevo
campeón de la Cart haBló para SEMANA y le contó lo que sintió por la muerte de Moore, sus experiencias en
este primer año de campeonato y sobre su futuro.
SEMANA: ¿ Cómo recIbió el título de campeón de la Cart?
JUAN PABLO MONTOYA: Con mucha alegría. Pero también con mucha tristeza. Lo que ocurrió a Greg Moore
fue muy triste y eso no me permitió disfrutar el triunfo. Nunca me imagine que el accidente de Moore fuera a
terminar en semejante tragedia.
SEMANA: ¿ Cuál fue la parte más difícil del campeonato?
J.P.M.:Las últimas tres carreras. Sobre todo las de Houston y Australia. Las estrelladas que tuve por poco
arruinan todo lo que había hecho a lo largo de la temporada. Cuando llegué a Fontana estaba tranquilo. Sabía
que había cumplido y si quería lograr el título tenía que trabajar como lo había hecho durante el campeonato:
concentrado, conduciendo al límite y solo habia que esperar que transcurriera las tres horas de competencia
para saber qué pasaría. Por fortuna todo salió bien y logré darle este título a Colombia.
SEMANA: La carrera de Fontana fue dramática por todo lo que estaba en juego. ¿En qué momento se dio
cuenta que era campeón?
J.P.M.: Unos cuantos segundos después de haber pasado la meta. Chip Ganassi me había dicho que para
ganar tenía que pasar a Gugelmin porque Franchitti había mejorado mucho. Cuando me dieron la orden de ir a
fondo y pasar como fuera a Gugelmin tan sólo faltaban cuatro vueltas... No volví a escuchar nada en la
comunicación interna con los pits. Le di con todo y lo único que me acuerdo es que vi la bandera blanca que
anunciaba la última vuelta. Pasé la meta y todo seguía en silencio. Luego oí el grito de Chip por el audífono:
"You are the champion "...
SEMANA: ¿Qué sintió?
J.P.M.: No sé. Una mezcla de sensaciones muy chéveres. Me acordé de toda esa gente que ha creído en mí. Y
también me acordé de toda esa gente que ha dudado de mí.
SEMANA: ¿A quién recuerda en especial ahora como campeón?
J.P.M.: Sin ninguna duda a Gonzalo Rodríguez y a Greg Moore. Es muy triste y muy duro saber que ya no
están más con nosotros.
SEMANA: ¿Qué ha pensado después del impresionante accidente de Moore en el que perdió la vida?
J.P.M.:Yo creo que a uno cuando le toca morirse se muere. Greg era una estupenda persona. Yo no me
arrepiento de nada de lo que he hecho. A veces escucho que la gente dice que soy muy arriesgado. Pero no.
Ese es mi oficio. Lo único que sé es que me siento muy orgulloso de ser colombiano.
SEMANA: ¿El futuro?
J.P.M.: Muy simple, tengo un contrato de tres años con Chip Ganassi. Nos espera un duro trabajo ahora que
el equipo va a estrenar los 4 motores Toyota. Ese será un buen reto y toca afrontarlo. Y desde ya hay que
comenzar a pensar en eso y, como le digo, a trabajar con todo. Lo demás son especulaciones.
SEMANA: ¿Cómo se sintió en este primer año en la cart?
J.P.M.: Fue un campeonato increíble. Como un sueño. Pero al mismo tiempo una pesadilla. Hay que trabajar
mucho. Hay muy buenos competidores. Hay pilotos excelentes. Grandes equipos. Entonces hay que tener
una concentración del ciento por ciento si uno quiere lograr ser el mejor.
SEMANA: ¿Por qué habla de pesadillas?
J.P.M.:Todo lo que paso. Especialmente por la muertes de mis amigos.
SEMANA: ¿Este título y todas las cosas buenas que se han dicho sobre usted será aue lo nueden cambiar?
J.P.M.: No, qué va. Llevo 20 años haciendo lo mismo: corriendo, ganando, perdiendo, y seguiré en lo mismo.
Espero que por muchos años más. O sea que no hay ningún motivo para cambiar.