Nueva grabación atiza acusaciones contra Carlos Prasca, rector de Uniatlántico

Este es solo el inicio del diálogo que supuestamente sostuvieron el rector de la Universidad del Atlántico (UA), Carlos Prasca, y una de sus estudiantes, cuyo nombre permanece en el anonimato;  se trata de una nueva grabación —de casi cinco minutos— que conoció SEMANA en medio de las acusaciones lanzadas contra el directivo por presunto acoso sexual, este resultaría ser el segundo caso:

—La carrera en darte la cita fue porque me dijiste que ibas sola, ¿oíste? (risas). Mentira, mentira… estaba con deseos de tenerte cerca.

—(Risa nerviosa) Profesor y mañana a qué hora nos puede atender para, pues, cuadrar toda esta cuestión del evento que tenemos del mes…

—Tranquila, que tú me pones la programación.

—(Incrédula) ¿Cómo?

—Tú me pones la programación.

La nueva grabación se conoce cuando esta semana el directivo recibió el beneficio de duda por parte del Consejo Superior de la institución, que se reunió durante ocho horas para tratar el primer caso de denuncia sexual que lo involucra con la estudiante Laura Romero. Por lo pronto, el cuerpo colegiado decidió acoger los principios de “presunción de inocencia y el derecho al debido proceso” y así aguardar “los resultados de las investigaciones que están en curso” ante la Procuraduría.

En contexto: Permanencia de Prasca en Uniatlántico dependerá de la Procuraduría

En el audio que revela SEMANA, supuestamente se oyen las voces de Prasca y de una estudiante que cuya identidad no se revela. Carece de los elementos obscenos de la anterior, en la que claramente se hacía alusión a un demanda de sexo anal. Esta revista cuestionó al rector sobre si esa era su voz, a lo que contestó que no “había oído ninguna grabación” de este tipo y que “ese es un montaje que le pueden hacer a cualquiera”.

Sin embargo, la situación en este audio es por lo menos impropia, en el eventual caso de un rector de una institución de educación superior y de una estudiante, donde se nota la tensión de la joven a pesar de las risas:

—Dime una cosa ya. Ya aquí no soy más el rector. ¿Por qué es tan esquiva? No me contesta, [por qué no] me dice ‘no quiero saber nada de ti, váyase al carajo‘.

—Pues, lo que pasa, es que yo creo que los términos a los que usted y yo podemos dialogar son netamente de la universidad… y esa cuestión.

—¿Y qué? ¿Y tú eres qué? (inaudible) … De allá, de Venus…

—¿Cómo? No le entendí…

—¿Tú qué? ¿Vienes de un planeta raro?

—¿Por qué?

—(Risas) O sea que yo… ¿yo soy qué? Un rector de allá, de la galaxia, el rector de las galaxias…

—(Risas) Ay, no, es en serio, yo creo que eso es lo único que tenemos que dialogar. Hasta esos términos, no veo más allá.

—La quiero, yo soy terrícola, ¿oíste?

—(Una tercera voz femenina se escucha al fondo, inaudible, del lado de la estudiante) Yo sé pero usted es el rector y yo la estudiante. Y esos términos se respetan.

—Eh, eh, eh. No estamos en el colegio de doña Rita, ¿oíste?

—Bueno, profesor, entonces le sirve a las 10:30.

—(Risas) Ey, simplemente es más amabilidad, no más.

—Bueno, un poco más de amabilidad. Estimado rector, le sirve mañana… (risas) una reunión a las 10:30.

—No, no. Cuando yo te responda algo, simplemente quiero que seas mas amable.

—Ah, bueno. Perfecto.

Más información: Rector de Uniatlántico y capitán de Policía en Cesar, a responder ante Procuraduría

Cuando por fin se concreta la cita, la conversación toma un rumbo todavía más singular:

—Bueno, ya ahora soy sí el rector. Te espero mañana a las 10:30. Eso sí, ojo que yo soy terrícola. No soy de otro planeta.Yo creo que tú también eres de la Tierra, ¿oíste?

—Bueno, entonces nos vemos mañana a las 10:30

—Aunque más hermosa que las terrícolas.

—Bueno, nos vemos mañana a las 10:30

—Te quiero… (ríe) Ahora sales a correr…

—Bueno listo, chao, que tenga una buena noche.

—Listo. Felices sueños, voy a soñar contigo, ¿oíste?

Oiga aquí el audio completo

Prueba reina

Por medio de un comunicado, el Consejo Superior dijo que en la reunión del lunes se acordó esperar a los resultados de la indagación abierta que está realizando la Procuraduría “antes de adoptar una decisión sobre la situación administrativa del rector”, lo que en plata blanca significa que Prasca se mantendrá en su cargo y su permanencia dependerá del dictamen del Ministerio Público, que le abrió a finales de enero una indagación preliminar. El rector apenas se notificó del proceso este lunes.

En diálogo con SEMANA, Prasca no solo agradeció al Consejo Superior de la universidad lo que denominó una “oportunidad de [defender] la presunción de inocencia” de su gestión, sino que mostró la prueba reina que exhibió ante el pleno: una declaración juramentada en la que su supuesta víctima, la estudiante Romero, negó haber sostenido algún tipo de “relación afectiva” con el directivo.

Esta declaración no pudo llegar en mejor momento para el rector. Con este testimonio favorable, no solo se sacude las acusaciones en su contra sino que también salpica a dos de sus más fuertes opositores en el claustro.

Le puede interesar: Más recursos para la Universidad del Atlántico

“Dimos a conocer ante el Consejo Superior una declaración juramentada de la mujer que, se afirma, es la voz que se escucha en los audios. Ella presentó esa declaración donde señala que Carlos Prasca no la ha acosado sexualmente, que no he tenido relación sentimental con ella y, por lo tanto, no hay relaciones íntimas de ningún especie”, declaró.

Al preguntársele por el origen del documento, el rector dijo: “No conozco esa situación. La declaración tiene fecha 12 de febrero, a la universidad llegó el viernes 15. Fue radicada por correspondencia, dirigida a la Secretaría General”.

El documento, elaborado en la Notaría Séptima de Barranquilla, señala: “Debo manifestar que jamás he tenido relación de carácter sentimental alguna con el profesor Prasca Muñoz. Por consiguiente, jamás he tenido relaciones íntimas como tampoco he sido acosada sexualmente”.

La prueba está acompañada de una declaración del mismo tenor, firmada por Angela Adriana Peña, quien se identifica como madre de la joven: “Nunca ha sostenido ninguna relación marital o sentimental con el profesor Carlos Prasca, rector de la Universidad del Atlántico y menos que fuera acosada sexualmente por él”.

La madre añade en su declaración que “le propusieron hacer parte de un complot para tumbarlo de la Rectoría, consistente en montar unos audios con su voz, dado que tenían una parecida a la de Prasca con una mujer y que como no tenían identificada esa mujer (sic), querían tener una militante del partido del cual ella hacía parte para que se prestara en este montaje y sostuviera ante las autoridades que había sido acosada por el rector. Mi hija no se prestó para eso”.

Vea ambas declaraciones:

Caso Uniatlántico: declarac... by on Scribd

Pero eso no es todo. Según dijo Prasca, retomando lo que dice Laura en su declaración, Laura Romero “pertenecía a la Juventud Comunista, la JUCO. De ahí, a través de unos intermediarios, que presuntamente son directivos de la institución, Roberto Figueroa (representante de los profesores) y Antonio Vallejo (exrector), la contactaron para que se prestara para un complot. Después de eso, en el Consejo Superior [del lunes] yo le pregunté al doctor Figueroa si ella conocía a la joven que identifica como Laura Romero Peña. Él lo negó”.

Acusaciones cruzadas

SEMANA consultó al profesor Roberto Figueroa, quien reconoció que sí conoce a la joven, pero que ante el Consejo Superior lo había negado para no exponerla. “¿Por qué dije que no la conocía? A los dos días de que sale el primer audio, cuatro estudiantes —incluyéndola a ella— vienen a mi casa, pidiéndome que los ayudara. Ella se sentía intimidada por el señor Prasca, por el poder que él ejerce en la Uniatlántico y porque ella no quería perder su semestre. Me pidió que la protegiera, pero yo no tenía los medios para hacerlo”.

Le recomendamos: Presuntos casos de acoso sexual develan lucha intestina en Uniatlántico

El docente aseguró que no solo es un audio el que podría comprometer a Prasca, serían 21 los que esperan ver la luz y están en manos de los estudiantes. “Él [Prasca] dice que son inventados, una manipulación. Aquí lo importante no es si yo soy el que denuncio o soy el que está detrás. Por las grabaciones, conozco hasta ahora tres casos documentados de acoso sexual”, incluyendo el de Laura.

Por consejo de Figueroa, Laura Romero acudió a la Fundación Fudemoracia, dirigida por el abogado defensor de derechos humanos Juan David Ortega, quien sale mal parado en la declaración como parte de un supuesto complot contra Prasca, y es que el actual rector —desde diversos escenarios, incluyendo la entrevista para este artículo— no duda en levantar el dedo acusador: “La izquierda de la universidad me odia, solamente porque invadí su territorio”.

En conversación con el abogado Ortega, manifestó ser defensor de “los estudiantes que de una u otra manera son detenidos arbitraria e ilegalmente, en el marco de las protestas pacíficas que desarrollan organizaciones estudiantiles”. Por tal motivo le habrían llegado los casos de Laura y otras dos estudiantes, y se decide interponer una denuncia, para lo cual se firman los poderes respectivos. Sin embargo, los procesos nunca fueron llevados ante los estrados. Según Ortega, en el caso de la estudiante Romero, fue ella misma quien retiró el poder. 

Ortega negó cualquier tipo de relación con sectores de izquierda asociados con la Uniatlántico. “No entiendo por qué Prasca me viene a señalar de ser parte de una izquierda que quiere derrotarlo en la universidad. Por otra parte, no he tenido ningún tipo de vinculación legal ni contractual con la institución, para qué yo algún tipo interés en su permanencia en la rectoría”. Al rector se le reconoce como cercano de Cambio Radical y, en general, al todopoderoso charismo barranquillero.

Presunta coacción

Sin embargo, las denuncias nunca fueron llevados ante los estrados por el temor de las víctimas a eventuales represalias. Ortega opina que en el caso de la estudiante Romero, ella fue coaccionada para retirarle poder. “Aún así la defendemos y siempre hemos creído que Laura Romero es una víctima y que en estos momentos sospechamos que ha sido coaccionada o intimidada para cambiar su versión de los hechos”, expresó.

Añadió que “podemos dar fe de su temor fundado para adelantar este proceso y nos sorprende como una persona que acude a una fundación, que acude a un abogado, decidida a presentar una denuncia, que relata unos hechos pormenorizados y que otorga el poder para iniciar el proceso penal, un día antes se arrepiente. No contentos con eso, el día después saca una declaración señalando todo lo contrario. Por lo menos, eso nos debe indicar que algo ha sucedido”.

Por lo pronto, sus expectativas están puestas en el proceso ante la Procuraduría, a donde llegaron tanto los audios como la declaración de Romero. “Carlos Prasca le ha mentido al Consejo, a la universidad y a la sociedad barranquillera”, dice el abogado Ortega. Ahora es el Ministerio Público el que tiene la palabra.