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CUATRO PREGUNTAS

Semana
30 de agosto de 1999

Como hay cosas de las que uno se sorprende y cuya explicación no está a la mano, tal vez
sea lo mejor echar al aire algunas inquietudes y darle por título al cuestionario el nombre de un viejo
bambuco: Cuatro preguntas.¿Qué hacía la registradora nacional, doña Clara González, en el homenaje que se
le ofreció a Horacio Serpa en el Jockey Club, la semana anterior?, ¿se confirma, por ese lenguaje de los
actos sociales, que las directivas liberales sí estaban detrás del puesto del registrador Jaime Calderón,
tumbado diligentemente por la Fiscalía?¿Por qué vistieron a Valentina con un trajecito de capitana de navío
(quedó divina, por lo demás), imitando al ex ministro Fernando Botero, cuando vestía sus niños con trajes de
camuflaje en las paradas militares?¿Cómo así que el recuperado periodista Daniel Samper llama 'amiguito
inepto' al actual mandatario, olvidado del todo del 'hermanito Ernesto', el presidente más enredado de este
siglo?¿Cuánto hace que sobrevuelan el territorio nacional los aviones secretos de Estados Unidos? ¿Por qué,
en el planteamiento económico, los trabajadores deben ganar menos, si quieren empleo, y de ninguna manera
los empresarios, si quieren tener empleados?¿No hay un periodista investigador que, aunque sea por
curiosidad, descubra quién es el contratista beneficiado con la fabricación de bolardos para Bogotá, a un
precio de 48.000 pesos cada boliche instalado?¿Percibieron ustedes que el ex presidente Carlos Lemos, en
artículo de la semana pasada y para el mejor entendedor, reclama la intervención norteamericana, así sea
apoyándose en los organismos no gubernamentales, tan odiados por los derechistas?¿Por qué, otra vez
mi viejo amigo Daniel Samper, afirma que a partir de 1953 se descuidó la educación en Colombia?, ¿saben
ustedes a quién tumbaron del poder el 13 de junio de ese año?¿Por qué nunca le han dado el premio de
periodismo al caricaturista, colaborador de El Tiempo, Jorge Grosso?¿Por qué siguen existiendo esos
galardones de la empresa privada, con los que se felicita al periodismo mediante un discutido honor y una
escasa remuneración?¿Cuál es el grado de alcoholemia que permite el alcalde-policía, Enrique Peñalosa,
para circular por su ciudad?, ¿el que decidan sus gendarmes? ¿o el suficiente para mortificar a los
ciudadanos que hayan asistido a una comida con copa de vino?¿Con cuántos más peajes, bolardos, petardos,
gan-zúas, grillos y cepos va a maltratar el alcalde-policía a la ciudadanía bogotana?¿Es verdad que para
revocar a Peñalosa se exige que el firmante haya votado por él?, ¿y esto cómo se comprueba, si el voto es
secreto?¿Por qué las sentencias de la Corte se toman ahora, no como fuentes importantes para interpretar el
derecho, sino como leyes escritas?¿Por qué nunca se habló del odioso e injusto Upac en los gobiernos de
López, Turbay, Belisario, Barco, Gaviria y Samper?¿Por qué no han hecho cardenal a monseñor Pedro
Rubiano?, ¿acaso por lo del elefante, que fue decir una verdad como una iglesia o por la 'masacre' de las
palomas, que le orquestó un periodista de televisión, uno de los que despidió a Samper en el
Metropolitan?¿Por qué no se conoce, aunque se sabe que hay un nuevo nuncio de Su Santidad?¿Quién puede
leer una encuesta en que se pregunta a un mismo tiempo: 'Usted aprueba o desaprueba' y la respuesta se
ilustra con una sola barra?¿Quién manipuló tal encuesta, en que se coloca a Samper por encima de Pastrana,
en casi todos los órdenes?, ¿acaso el Fiscal ?, ¿acaso Lemos o Lemoine?¿Quién consiguió enfurecer a Victorgé
?