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El hacha de mis mayores

La abnegada labor del mayor Herrera no fue un obstáculo para que la prosperidad tocara a las puertas del hogar.

Daniel Coronell
15 de septiembre de 2012

El general Mauricio Santoyo no fue el único que se enriqueció durante su paso por la secretaría de seguridad presidencial. El alto oficial -hoy preso en Estados Unidos por sus negocios con la Oficina de Envigado- parece ser el primero y no el último con explicaciones pendientes por las cosas que sucedieron en un período que incluye su paso por la Casa de Nariño.
 
El Representante a la Cámara Iván Cepeda acaba de revelar una llamativa lista de oficiales en la que encontré uno del cual había oído antes.
 
Se trata del mayor de la policía Mario Fernando Herrera Ariza. El congresista Cepeda asegura que “era jefe de seguridad de Tomás Uribe y mano derecha del general Santoyo. Concertaba las citas de 'El Canoso' y Tomás Uribe. Tiene una empresa de seguridad que es fachada para lavado de activos, Seguridad Silver Limitada”.
 
Agrega el parlamentario algo que me resulta especialmente sensible. Según una información obtenida por Cepeda, el mayor Herrera y el general Santoyo “se reunían en la sede de la empresa Seguridad Silver, cerca de Noticias Uno, para hacerle seguimientos a Daniel Coronell”.
 
Hace tres años, justamente por estas fechas, escribí una columna donde salió a flote el nombre del mayor Herrera. Era una investigación sobre un político menudo llamado Javier Socarrás Amaya que había hecho campaña de la mano del hijo mayor del entonces presidente. Así lo demuestran videos y fotos. (Ver campaña al concejo.jpg) (Ver video La Lira)
 
Javier Socarrás fue mencionado como presunto miembro de un grupo que traficaba con fallos del Consejo de Estado para favorecer a políticos y también por el trámite de una tarjeta profesional de abogado a su nombre, con una certificación falsa desmentida por la correspondiente universidad. (Ver certificado Universidad.jpg)
 
Socarrás mantenía comunicación tanto con Tomás Uribe como con su jefe de escolta el mayor Mario Fernando Herrera. Según correos electrónicos de Javier Socarrás, el mayor Herrera recibía de él requerimientos sobre asuntos de seguridad y también sobre temas burocráticos.
 
Sin que nadie se los hubiera asignado oficialmente, Socarrás frecuentemente estaba protegido por escoltas oficiales. Algunas veces lo acompañaban miembros del esquema de seguridad de la familia presidencial, incluso cuando ya había estallado el escándalo en torno a su nombre fue visto y fotografiado con el jefe de esquema de Tomás Uribe, el mayor de la policía Jaime Hernán Guzmán. (Ver foto Socarras.jpg)
 
El mayor Guzmán remplazó al mayor Herrera cuando este último fue premiado con una misión en el exterior después de caminar tantos caminos al lado del primogénito del entonces presidente.
 
Su abnegada labor no fue un obstáculo para que la prosperidad tocara las puertas del hogar del mayor Mario Fernando Herrera. Su esposa y otro familiar compraron una empresa de seguridad y vigilancia llamada Silver, la misma en cuya sede se reunía con Santoyo, según la denuncia de Iván Cepeda.
 
A pesar de que la compañía ha tenido numerosos problemas legales y de que la Superintendencia de Vigilancia le quitó el año pasado la licencia de funcionamiento por graves irregularidades, los activos de la empresa se han quintuplicado en cuatro años. (Ver activos 2008-2012.jpg)
 
Pasó de 316 millones en 2008 a 1.487 millones este año. Entre la selecta clientela de Silver Ltda. están varias empresas en las que tiene presencia el grupo Nule.
 
El mayor Mario Fernando Herrera ahora trabaja en la dirección de protección de la Policía Nacional que cuida entre otras personas a diplomáticos, jueces y periodistas amenazados.
 
Él y su sucesor el mayor Jaime Hernán Guzmán -por cierto bien emparentado en la cúpula policial- esperan ser llamados a curso de ascenso para teniente coronel en las próximas semanas. Quizás lleguen a generales. (Ver aspirantes a ascenso.jpg)
 
Video 'La Lira'