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La importancia de los medios en una democracia

Universalmente, se reconoce no solamente la importancia, sino la inmensa responsabilidad de los medios de comunicación para que se respeten las libertades y los derechos inalienables de la sociedad.

David René Moreno Moreno
17 de abril de 2024

Una de las características de la democracia es la libertad de expresión, por lo cual los gobiernos totalitarios tratan de controlar y silenciar los medios de comunicación para evitar que su papel sea decisivo denunciando los errores, abusos y atrocidades que comenten estos regímenes contra la población; los medios de comunicación son la voz de quienes no pueden hablar y el sentimiento de quienes se sienten oprimidos y sojuzgados. Universalmente, se reconoce no solamente la importancia, sino la inmensa responsabilidad de los medios de comunicación para que se respeten las libertades y los derechos inalienables de la sociedad.

Cuando se calla y no se denuncian oportunamente las injusticias y las arbitrariedades se está cohabitando con el delito y con la transgresión de la ley, así como cuando en forma irresponsable se minimizan u ocultan los resultados de las fuerzas legítimas del estado en la defensa de la sociedad que está siendo agredida por grupos delincuenciales que tienen secuestrada la voluntad y el espíritu de la población o cuando se emplean inclusive los medios del estado para enaltecer a los bandidos y justificar sus fechorías, tratando de violentar la mente de la población a la cual se quiere imponer una ideología política.

Los medios de comunicación son el contacto con el mundo real, pero algunos son utilizados maquiavélicamente para influir en las personas, inclusive ‘corriendo la línea ética’, como manifestó en la pasada campaña presidencial el hoy embajador en Chile, especialmente con las vergonzosas ‘bodegas’ donde centenares de personajes transmiten mensajes para desinformar o para orientar torcidamente la voluntad de la población hacia un propósito determinado, lo cual ahora ha sido reemplazado por los ‘bots’, en los que una sola persona, manipulando un sistema, puede invadir masivamente las redes sociales con cualquier tipo de mensaje.

No es fácil digerir lo que está sucediendo en el país bajo el actual sistema de gobierno, pues en lugar de buscar el beneficio y la prosperidad para más de 50 millones de personas, se continúa polarizando la mente y profundizando una brecha de odio entre la población. Se ha empeñado el jefe de gobierno en politizar la salud, que es un derecho constitucional, así como quiere acabar con la clase media trabajadora y generadora de empleo, quiere destruir las fuentes de recursos estatales como Ecopetrol, donde su acción ha perdido un gran valor y se ensaña contra toda institución donde no ha podido colocar a sus adeptos ideológicos.

Es muy difícil comprender el porqué de sus desacertados proyectos por parte del poder legislativo, ya comenzó a gobernar por decreto e insiste en una Asamblea Constituyente para darle el puntillazo final a la democracia y a las libertades, así como busca que el próximo año se efectúe otra Reforma Tributaria para acabar con la economía; esto demuestra de una parte la falta de preparación de la izquierda para gobernar, así como los oscuros intereses para llevar a la sociedad hacia la miseria, pues ‘con hambre se puede dominar más fácilmente al pueblo’, según promulgan los zurdos.

Muchos colombianos se han vuelto inmunes al dolor de patria y no quieren comprender que el socialismo solo trae daño, resentimiento, persecución y hambre; países prósperos como Cuba en los años 50 llevan 6 décadas sumidos en la pobreza, países ricos como Venezuela han sido saqueados durante los últimos 25 años, potencias regionales como Argentina han tenido depreciaciones de su moneda que alcanzan los tres dígitos. ¿Cuál será el futuro macroeconómico y social de Colombia bajo el actual régimen?

La economía y la seguridad van de la mano y hay que reconocer que en estos temas el gobierno ha perdido el año, a menos que quiera llegar al caos para poder aplicar el artículo 213 de la Constitución frente al concepto de conmoción interior, para engalanarse con las atribuciones legales que le permitirán legislar a su antojo para aferrarse al poder. El gobierno ha perdido el control del territorio en varios lugares y es así como los narcoterroristas, desafiando la autoridad legítima, están inaugurando obras de infraestructura en algunas poblaciones. Qué vergüenza.

Parece que en algunos medios se han olvidado del tema de las milicias que se están conformando, así como poco se menciona el fortalecimiento de la nefasta ‘primera línea’, ni se refieren a las delicadas ‘denuncias’ de Benedetti, ni las visitas a cárceles norteamericanas por parte de honorables congresistas, ni los posibles acuerdos de La Picota, ni las sensibles investigaciones del entorno al jefe de gobierno, ni la posible violación de los topes o límites de gastos en las campañas electorales; los medios de comunicación, en su labor responsable y vigilante, no pueden permitir que los delitos prescriban o pasen al olvido por premeditada omisión.

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